Barcelona, 20 mayo 2004 (Efe).- El Unicaja casi se vio fuera en el primer cuarto, en el que la superioridad del Barcelona conllevó diferencias para los azulgrana de hasta once puntos (20-9 y 21-10).
La escasa oposición que encontraban los jugadores de Svetislav Pesic tras largas posesiones de ataque les permitía anotar con comodidad.
La imagen ofrecida por el equipo de Sergio Scariolo, blanco de las iras de la grada por su pasado madridista, no tenía nada que ver con la mostrada en cuartos de final y, al término de este primer periodo, la ventaja azulgrana ascendía a diez puntos (23-13).
La diferencia fue a más apenas iniciado el segundo cuarto (26-13) y parecía que el partido se le escapaba al Unicaja, pero Risacher, que había visto los primeros minutos desde el banquillo, dio entonces un puñetazo sobre la mesa y lideró un parcial de 0-10 que metió de nuevo al conjunto andaluz en el encuentro.
Del 26-13 se pasó a un 26-23 que tuvo que romper Dejan Bodiroga con dos tiros libres, aunque su rival no estaba dispuesto a que la cosas se le fuesen de nuevo de las manos.
Svetislav Pesic decidió frenar la movilidad de los pivots del Unicaja situando bajo los aros a Bodiroga y a Gregor Fucka, con lo que renunciaba a contar con un cinco nato como Roberto Dueñas o Patrick Femerling.
La fórmula apenas le sirvió para que su equipo se fuese al descanso con una escasa diferencia de tres puntos (34-31), tras encajar un parcial en el segundo cuarto de 11-18 con el único lunar para el Unicaja de la tercera falta de Walter Herrmann.
Sin embargo, la historia del primer periodo se repitió en el tercero, que el Barcelona abrió con un 6-0 a favor, cerrado con un triple de Juan Carlos Navarro, que repetía poco después para poner nuevamente a los suyos por encima de la barrera de los diez puntos (43-33, min.24).
Louis Bullock, mucho más activo en la segunda mitad, hizo lo que pudo por evitar el desastre, pero su rival volvía a mostrarse muy superior.
Roger Grimau reapareció en el minuto 25, tras más de tres meses de lesión, y, en el 29, llegaba una nueva máxima para el Barcelona, en este caso de catorce puntos (55-41), que se repitió en los inicios del último cuarto (63-49, min.33).
A cinco minutos del final las diferencias estaban en diez puntos (63-53) y Svetislav Pesic ordenó a sus jugadores que apretasen en defensa para que el rival no resucitase por segunda vez cuando todo el mundo le daba por muerto.
Pesic se olvidó sin embargo de organizar el ataque y su equipo estuvo más de cuatro minutos sin anotar, bloqueado una vez más ante una zona, en este caso la empleada por Scariolo.
La sangría de esa incapacidad anotadora culminó en un 63-61 a casi tres minutos para el final que le devolvía la vida al Unicaja en el momento decisivo.
El entrenador del Barcelona se mantuvo en su criterio e instó a sus jugadores a que se mirasen en el espejo de Rodrigo de la Fuente, la sombra de Louis Bullock desde que el base de Unicaja se destapó.
La jugada clave llegó a 52 segundos del final, con 66-63 en el marcador y posesión para el equipo de Scariolo, porque Bullock erró en su lanzamiento triple y dejó el sueño malagueño en manos de un Bodiroga que no perdonó desde la línea de tiros libres.
72 - F.C. Barcelona (23+11+24+14): Ilievski (7), Navarro (14), Bodiroga (17), Fucka (10), Dueñas (6) -equipo inicial-, De la Fuente (6), Rodríguez (-), Drejer (3), Femerling (7) y Grimau (2).
65 - Unicaja (13+18+16+18): Sonko (8), Bullock (17), Lewis (3), Herrmann (8), Kornegay (2) -equipo inicial-, Germán (-), Berni Rodríguez (2), Risacher (12), Giannoulis (-), Cabezas (11) y Weis (2).
Arbitros: Amorós, García O. y Pérez Pizarro. Eliminado Femerling (m.38).
Incidencias: Primer partido de la serie semifinal de la Liga ACB, disputado en el Palau Blaugrana ante 7.573 aficionados.