Málaga, 9 Feb. 2007.- El Real Madrid avanzó a las semifinales de la Copa del Rey con sufrimiento pero jugará contra el TAU Cerámica este sábado a las 19:30h. El equipo blanco sufrió hasta la última décima para superar a un formidable Gran Canaria Grupo Dunas, que recuperó 15 puntos de desventaja para rozar la heroica y la que hubiera sido su primera victoria en Copa y también la mayor campanada del evento en años.
Louis Bullock rescató al Real Madrid con una actuación extraordinaria. Hasta 33 puntos, uno detrás de otro, en un auténtico partidazo que no sólo acabó con la gran resistencia amarilla sino que estableció la mejor marca anotadora en la Copa del Rey en 10 años, desde que Arlauckas hiciera 37 en 1997. Suyos fueron cuatro triples letales y 13 tiros libres que fueron minando las opciones grancanarias, pero sobre todo suyo fue el empuje que tiró del carro madrileño en unos cuartos de final que se les pusieron cuesta arriba.
Pero le salvó Bullock. El carácter amarillo encogió el corazón blanco para ponerlo en un puño y hacer dudar de la victoria, pero Bullock fue toda frialdad e inteligencia para comandar el triunfo, al que los 20 puntos y 9 rebotes de un Felipe Reyes con mano firme en tiros libres decisivos también sirvieron como perfecta guía hacia la victoria.
Y ahora, Real Madrid TAU Cerámica. Primero contra segundo en un duelo estelar entre dos equipos que juntan tanta rivalidad reciente como estrellas lucen en su potente plantilla.
El Real Madrid sale más fuerte
Pese a la clara ventaja blanca, el Gran Canaria Grupo Dunas estaba muy centrado y motivado; no pensaba renunciar y el 22-12 de final del primer periodo se convirtió rápidamente en 22-19, fruto del excelente rendimiento de Sergio Pérez Anagnostou y Jimmie Hunter, que anotó sus primeros puntos con un 2+1. Pero Charles Smith no estaba por la labor y comandó un nuevo tirón del Real Madrid, que mezclaba la calidad de sus estrellas con la aparición de jóvenes como Jan Martín o Richard Nguema sin que ello debilitase su poderío.
Felipe Reyes seguía haciendo daño, pero Louis Bullock cogió su testigo protagonista para anotar seis puntos, elevar su cuenta a 14 y llevar de nuevo al Real Madrid a la cómoda cota de 10 puntos (44-34). Dos tiros libres de un fiable Mario Fernández cerraron la primera mitad (44-36).
El Gran Canaria Grupo Dunas se va arriba tras el descanso
Saltó la alerta amarilla para el Real Madrid, que de nuevo hubo de apelar a sus dos más grandes estrellas, Felipe Reyes y Louis Bullock, que se unieron para anotar seis puntos consecutivos y aliviar la crisis (59-52). Alivio sólo momentáneo, pues Kornel David redujo a la mínima expresión la renta madridista (59-57) y un sobresaliente Mario Fernández recuperó un balón y anotó para poner la igualdad en el electrónico (59-59). Un alley-oop culminado por Milic culminó el tercer periodo con exigua renta blanca: 61-59.
¡Ventaja canaria!
Pese a la continua oposición canaria, el Real Madrid parecía haber superado el enorme impacto de la remontada. Tenía el control del electrónico y del juego, esa ventaja mental que vale mucho más que entrar en los últimos cinco minutos con tres puntos de renta (71-68). Dos tiros libres de Bullock y una canasta de Felipe Reyes tensaron la cuerda (75-68), pero el Gran Canaria Grupo Dunas no aflojaba y entraba en los 2:30 finales sólo tres abajo (75-72).
¿Lógica o sorpresa?
¡Y Bullock falló otro tiro libre! Llevaba 71/73 en liga y en el momento más caliente, a 35 segundos, sólo pudo anotar uno. Claro que Savané tiene peor mano y erró los dos. ¿Todo perdido para el Granca? No. Un robo de Mario Fernández y asistencia para Kornel a seis segundos del final puso el encuentro a ritmo de taquicardia: 81-80 a 6,2 segundos, pero balón para el Real Madrid.
A Felipe Reyes no le tembló la mano, con dos tiros libres para poner el choque 83-80 a falta de 5,6. Ya quedaban 4,2 cuando Norris optó por anotar los dos y apretar más el choque (83-82), aunque cada vez con menos tiempo para el imposible. Bullock no erró en los tiros libres y selló el resultado final a 1,1 segundos: 85-82. El imposible de un lanzamiento de larga distancia no fue posible y la victoria fue finalmente madridista.