Málaga, 28 dic. 2003 (EFE).- Un parcial de 12-0 y dos minutos (del 36 al 38) sin que los gallegos lograran una sola canasta, propiciaron la derrota del Leche Río en un partido en el que los gallegos quizás merecieron un mejor resultado.
El conjunto malagueño siempre mandó en el encuentro, ante un Leche Río que llegó muy ajustado de efectivos, además con la lesión del argentino Jorge Racca, pues solo dispuso de seis jugadores, aunque mantuvo a raya a Unicaja con una defensa zonal que le creó muchos problemas.
Los primeros diez minutos se consumieron con un parcial de 22-17 que dieron paso a un festival de triples del Unicaja en el segundo cuarto, con cinco anotados, que pusieron una máxima diferencia de 33-19 (m.14).
El equipo lucense había bajado muchos enteros sobre todo en defensa y sus hombres altos, los pivotes, no estaban tan efectivos en el aro contrario.
Aun así intentaron recortar diferencias e incluso se pusieron a solo dos puntos (41-39) cuando finalizaba el segundo cuarto, que finalmente se decantó con un 43-39.
En la reanudación todo cambió, el Lecho Río mucho más centrado por lo que se jugaba, ganó en todas las facetas del juego a un Unicaja muy nervioso, que no pudo con la defensa zonal del técnico del club gallego, por lo que en el minuto 25 se puso por primera vez por delante en el marcador (47-48) con una canasta del pívot estadounidense Davis.
Hasta llegar al minuto 30 el juego fuero muy igualado y tuvo que ser el base Bullock, con un triple, el que devolvió la confianza a Unicaja, para concluir con un 60-58.
En el último cuarto la igualdad fue máxima aunque el Leche Río comenzó a distanciarse y en el minuto 35 tuvo la máxima diferencia (62-69).
Unicaja estaba atascado en el ataque, todos los jugadores tenían miedo y eso lo aprovecho el Breogán, pero la salida del base malagueño Carlos Cabezas fue providencial, ya que los malagueños lograron un parcial de 12-0, que dio la vuelta al marcador (74-69) a falta de más de dos minutos para el final.
Unicaja se transformó con una defensa dura y agresiva y un rápido contragolpe que desarboló pro completo al Breogan al que flaquearon las fuerzas.
Todavía quedaba tiempo que dio para mucho porque los lucenses querían ganar, estuvieron, a falta de 28 segundos, a dos puntos (81-79) e incluso protestaron varias decisiones de los colegiados lo que provocó la descalificación del delegado del Breogán.
En los instantes finales los tiros libres dieron a Unicaja la posibilidad de salir de los puestos de peligro y dejó al Breogan sin plaza para la Copa del Rey.
Unicaja, 90 (22+21+17+30): Bullock (33), Sonkó (5), Herrmann (7), Lewis (16) y Kornegay (4)-equipo inicial-, también jugaron Rodríguez (3), Phillips (2), Cabezas (14), Gabriel (6) y Weis (0).
Leche Río, 83 (17+22+19+25): Gomis (13), Sanmartín (14), Biota (6), Fernández (6) y Davis (19) -cinco inicial-, Lewis (17), González (8).
Arbitros: Martín Beltrán, Fernández y Pérez Niz. Eliminaron, por cinco personales, a Kornegay (m.34), técnica, por protestar, a Davis (m.3) y descalificado el delegado del Breogán, por protestar.
Incidencias: Partido de la décimo séptima jornada de la ACB disputado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena ante unos 7.000 espectadores.
Unicaja
JORNADA 17 - Liga Endesa
Leche Río Bre.
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