Barcelona, 30 Abr. 2011 (EFE).- El Regal FC Barcelona se medirá este domingo con el Lagun Aro en el Palau (19:00 horas) a la espera de que una carambola le dé el campeonato de la Liga regular, y así afrontar la fase final con el campo a favor.
Para ello, el conjunto catalán debería ganar su partido y esperar un tropiezo del Real Madrid, al que aventaja en la diferencia de puntos, además de una victoria. Si se diese esta carambola, y a falta de dos partidos para el final de la Liga regular, el Barcelona afrontaría los dos últimos choques sin ningún objetivo deportivo, frente a Meridiano Alicante y Unicaja de Málaga.
Para el choque del Palau Blaugrana el entrenador Xavi Pascual tiene la duda de Jaka Lakovic, quien sufrió una rotura fibrilar en el bíceps femoral de la pierna izquierda. Su concurso es una incógnita, no así los lesionados de largo recorrido, como son Gianluca Basile y Pete Mickeal.
El conjunto catalán afronta un nuevo choque después de haberse sobrepuesto hace unas semanas al bajón más espectacular que ha sufrido en el campeonato, con dos derrotas seguidas en la Liga y la eliminación por un 3-1 contra el Panathikaikos en la Euroliga.
No obstante, y a pesar de haber recuperado el rumbo, el Barcelona no es el conjunto que se exhibía y paseaba por las pistas, y prueba de ello fue el ajustado triunfo del lunes contra 'La Penya', en un encuentro dominado sin problemas por los azulgrana pero que se le torció al final, aunque pudo salvarlo en Badalona por tres puntos (65-68), idéntica diferencia con la que ganó al Lagun Aro en la primera vuelta (75-78).
Es por ello que el Barça necesita cuanto antes agarrar la primera posición de la Liga para que algunos de sus jugadores se tomen un mínimo descanso, que buena falta les hará en la fase final.
A pesar de que el objetivo de la primera posición en la ACB es el que persigue el conjunto barcelonista, de nada le sirvió el año pasado, cuando llegó a la final y el Baskonia le quitó la Liga por un inapelable 3-0, algo similar a lo que ha sucedido en la actual Euroliga, en la que el Barça firmó dos fases espectaculares pero a la hora de la verdad el factor campo no le sirvió de nada.
El Lagun Aro GBC, tras consumar la permanencia la pasada jornada, tratará ahora de mejorar el aprobado que otorga el objetivo cumplido con un triunfo en el Palau Blaugrana, algo que ya consiguió hace cinco temporadas.
Los donostiarras ciertamente merecen algún triunfo de relumbrón después de haber tuteado durante la temporada a equipos como Caja Laboral, Real Madrid o el propio Barcelona, además de ganar al Unicaja, pero no parece que el feudo barcelonista sea el más apropiado para ello.
Además el equipo de Pablo Laso sufre ahora las bajas que le han respetado durante toda la Liga y, a la marcha del georgiano Skita, tiene que sumar la pérdida de Alfonso Sánchez para toda la temporada y la de Domen Lorbek, hermano del barcelonista Erazem.
Compensa estas tres ausencias con el fichaje del letón procedente de Huesca, Freimanis.
El técnico vitoriano ya ha advertido que no quiere que su plantilla "se deje ir" en el tramo final de la temporada y, con al menos cuatro jugadores todavía con opciones de renovación de contrato, se presume que pondrá toda la carne en el asador ante un rival ante el que siempre gusta jugar.
En el encuentro de ida los guipuzcoanos vendieron muy cara su derrota y, únicamente en el tramo final, el conjunto catalán pudo lograr tres puntos de ventaja para adjudicarse una sufrida victoria por 75-78.