Unicaja y Ricoh Manresa se enfrentan en un duelo sin trascendencia

Málaga/Manresa (Barcelona), 8 mayo 2008 (EFE).- El Unicaja, octavo en la clasificación y sin opción de ascender alguna posición, utilizará el partido intranscendente de mañana ante el Ricoh Manresa, para preparar la eliminatoria de cuartos de final por el título frente al Real Madrid, que dará comienzo el próximo jueves en la capital de España.

El equipo cajista, al igual que el conjunto manresano, que disputará su último encuentro de esta temporada, intentarán ofrecer un buen espectáculo para el público que se congregue en el Martín Carpena, que esta campaña y hasta el momento, ha recibido más desilusiones que alegrías.

Los jugadores del Unicaja están pensando en el partido contra el Real Madrid, por lo que el técnico del club malagueño, Sergio Scariolo, empezará a poner en práctica los posibles sistemas que utilice y pedirá a su plantilla intensidad para hacerle frente al Ricoh Manresa.

El ala-pívot estadounidense Marcus Haislip posiblemente será reservado por unos problemas físicos para que pueda estar en perfectas condiciones para medirse al conjunto madridista.

También su compatriota Melvin Sanders, continúa con molestias y su participación es duda hasta horas antes del encuentro.

El croata Davor Kus ha declarado que el partido de mañana ante el Ricoh Manresa "es muy importante para nosotros porque tenemos que prepararnos para el Playoff y para coger un buen ritmo de juego".

Su compañero, el base serbio Bojan Popovic, ha indicado que el enfrentamiento contra el conjunto catalán "es bueno para nosotros para preparar el partido del Playoff contra el Real Madrid", aunque agregó que "queremos jugar bien y ganar este encuentro, el último de la Liga Regular antes del Playoff".

Popovic ha avisado de que después de este partido "tenemos poco tiempo para prepararnos para el Real Madrid", porque el primer encuentro de los cuartos de final de la fase por el título será el próximo jueves a las 21:35 horas en el Palacio de Vistalegre de Madrid.

Por su parte, el Ricoh Manresa no tiene presión para el partido de mañana ante el Unicaja, después de que los barceloneses certificaran su permanencia en la última jornada en casa ante el Grupo Begar León.

Como objetivo solo queda ya el buen sabor de boca de acabar con victoria. El entrenador del Ricoh Manresa, Jaume Ponsarnau, ha destacado "la presión" con la que el equipo ha tenido que convivir durante toda la temporada: "todo esto ha supuesto un desgaste".

Ponsarnau ha comentado que durante la semana ha intentado encontrar "las sensaciones para ir a Málaga, para hacer un buen partido e intentar competir".

Y es que, aunque la salvación ya está en el saco, recuerda que ganar en Málaga les garantiza la undécima posición y les da la posibilidad de conseguir la décima.

"Está claro que estos dos lugares finales son muy buenos y en este sentido sería un hito muy importante", ha dicho Ponsarnau. Para conseguirlo, el entrenador tendrá a su disposición toda la plantilla, a excepción del lesionado Guillem Rubio.

A favor, el Unicaja tiene el factor pista y la estadística, pues el Ricoh Manresa sólo ha ganado en cinco ocasiones de las veintiséis que ha visitado Málaga.

Ha comentado que los malagueños "tienen que afrontar un Playoff en el que querrán entrar con las mejores sensaciones posibles de cara a su gente".

Además, el técnico ha añadido que "nos encontraremos con un conjunto que lo dará todo para ganarnos. Con respecto a nosotros, la relajación con la que llegamos al partido, espero que no sea de esfuerzo, sino de presión".