Dani Miret es el nuevo entrenador del Club Joventut Badalona y desde el primer día ha demostrado su ilusión y ganas para afrontar este nuevo reto que tiene hasta junio del 2026. El técnico badalonés tiene claro que el objetivo es sacar el máximo rendimiento del equipo de aquí a final de temporada, y ha remarcado que es muy importante, no sólo el resultado final, sino el camino para conseguir los objetivos.
Miret ha confesado que “está en un club único en el mundo, donde se apuesta siempre por gente de la casa. Muy pocos lo harían, y en la Penya es nuestra forma de hacer las cosas. Yo intentaré transmitir el máximo de ilusión al equipo, y quiero sacar lo mejor de cada jugador. Quiero poner mi sello a nivel de baloncesto con los referentes con ADN Penya que he tenido”.
Ha explicado el nuevo entrenador de la Penya que “siempre he tenido la suerte de encontrarme con gente con grandes valores, y que me han ayudado a ser mejor persona y mejorar también en el mundo del baloncesto. La manera en que compites, cómo queremos definirnos cuando hacemos nuestro trabajo, qué es representar al Club, todo esto es con lo que me quedo y quiero remarcar. El esfuerzo y trabajar las cosas son el paso previo para conseguir los objetivos que te propongas”.
Ser entrenador de la Penya es un hito excepcional. En palabras de Miret, “es un sueño que supera la expectativa. Hace unos años, habría bromeado con ese sueño, pero sí tengo claro que depende de ti hacer el máximo de cosas posibles que están a tu alcance para conseguir estos sueños. A nivel mundial, cuando dices que eres de Badalona, la gente te mira diciendo: es un lugar de mucho prestigio por la formación y por la forma en que se entiende el baloncesto. Y esto me hace mucha ilusión”.
Miret aterriza en el banquillo del Joventut a seis jornadas por el final de la liga regular de la ACB. Para el nuevo técnico verdinegro, “durante estos 6 partidos intentaré sacar el máximo del equipo, ser competitivos y conectar al máximo con el sello que queremos imponer: mostrar lo que queremos que sea la Penya compitiendo. Los jugadores deben vaciarse y deben hacer que la gente se identifique con el equipo y sientan orgullo”.
Por último, el nuevo entrenador de la Penya ha remarcado la importancia del baloncesto base verdinegro: “Los mejores momentos de nuestra historia han sido cuando los jugadores de la casa nos han dado identidad y nivel competitivo. El Club ha pasado por momentos económicos muy complicados, y nunca ha dudado en cuidar el baloncesto base e invertir en él. Sabemos que es lo que puede darnos esta diferencia. Cuando tenemos jugadores de la casa, nos dan un plus de competitividad que no lo tienen muchos clubs en el mundo”.