iurbentia Bilbao Basket y Cajasol quieren seguir ganando y subiendo puestos

Bilbao/Sevilla, 3 nov. 2007 (EFE).- El iurbentia Bilbao Basket recibe mañana al Cajasol en La Casilla con la intención de aprovechar la inercia positiva generada gracias al gran triunfo logrado la última jornada en la cancha del líder DKV Joventut y consolidar así su posición por encima de la mitad de la tabla.

Esa contundente (58-81) y convincente victoria en el Palau Olimpic, probablemente el resultado más sorprendente alcanzado en las cinco primeras jornadas de la ACB, ha reforzado notablemente al grupo que prepara Txus Vidorreta, que ahora se plantea como próxima meta mantener un balance equilibrado después de ocho partidos.

"Eso significaría tener una balance positivo entre casa y fuera, porque sólo el Pamesa y nosotros jugaremos cinco partidos fuera de casa en las ocho primeras jornadas", recordó.

"Teniendo en cuenta el calendario y los rivales que nos quedan -Cajasol, Unicaja y Real Madrid- alcanzar los cuatro triunfos era algo muy positivo y ahora tenemos tres oportunidades de, por qué no, intentar mejorarlo si lo conseguimos a la primera", añadió el entrenador vizcaíno.

Para ello, el primer obstáculo que deberá superar el iurbentia Bilbao Basket será un Cajasol al que Vidorreta considera un equipo "de primerísima calidad" a pesar de haber elevado una sola victoria a su casillero en un titubeante comienzo de liga.

"Tenemos que pensar que enfrente hay un equipo de mucha calidad que por circunstancias está con un triunfo y nosotros con tres, pero que no tiene menor nivel que nosotros en ningún caso. Necesitamos imponer nuestro ritmo y que ellos no jueguen un baloncesto fácil y a su ritmo porque tienen mucha calidad", dijo.

Vidorreta tendrá a disposición a toda la plantilla, una vez recuperado Martin Rancik de la lumbalgia que le apartó del partido de Badalona, para un partido que el club bilbaíno aprovechará además para estrenar además a su mascota oficial, la araña 'Armi'.

El Cajasol espera enlazar en Bilbao frente al iurbentia Bilbao Baket su segunda victoria de la temporada, después de que la pasada jornada en Sevilla frente al Grupo Begar León lograra inaugurar el casillero de triunfos, y mantener así la escalada a una zona más alta de la clasificación.

El equipo que entrena el argentino Rubén Magnano ha tardado en arrancar -no lo ha hecho hasta la quinta jornada- y ahora confía que la presión por lograr la victoria haya desaparecido y que su baloncesto dé los frutos previstos en la pretemporada.

La formación vizcaína quizá no es el rival propicio para que el equipo sevillano logre esta segunda victoria, ya que, con tres triunfos, demuestra su potencial en este primer tramo de competición y además viene de imponerse con rotunda claridad (58-81) en la cancha de un DKV Joventut que se presentó en ese partido como líder indiscutible con un pleno de cuatro triunfos.

Para el partido de mañana, el Cajasol seguirá sin contar con el escolta madrileño Andrés Miso, quien mantiene el proceso de rehabilitación del problema de espalda que padece desde la pretemporada y que aún tiene algunas semanas más de baja.

Así, Rubén Magnano ha desplazado a los diez hombres que tiene disponibles en su plantilla.

El pívot Antonio Bueno, capitán del equipo, espera que la pasada victoria sea el primer paso para al crecimiento del equipo, para lo que "todo pasa por la defensa y tener equilibrio entre el juego exterior e interior", dijo.

Bueno auguró un choque "muy duro" en Bilbao y comentó que "como está el Iurbentia y con la igualdad de la ACB es casi más difícil ganar en Bilbao que en la cancha de un 'grande'".

La expedición del Cajasol viajó hoy a Bilbao donde se entrenó este mediodía en el escenario del encuentro, y regresará a la capital hispalense el domingo por la tarde tras la disputa del choque.