Chris Wright completó su etapa de formación en la prestigiosa universidad de Georgetown en la que promedió 12,4 puntos, 4 asistencias y 2,9 rebotes por partido. Su primera experiencia europea llegó en la liga Turca donde promedió 12,7 puntos y 4 asistencias jugando en el Olin Edirne. Regresó a Estados Unidos para alternar la NBA, Hornets y Mavericks, con la liga de desarrollo promediando 16,1 puntos y 6,8 asistencias por partido con los Iowa Energy.
Wright, que también acumula experiencias en Puerto Rico, Italia y Francia es un absoluto ejemplo de superación como demostró cuando en 2013 fue diagnosticado de esclerosis múltiple y, sólo tres meses después, firmaba un contrato con Dallas, convirtiéndose en el primer jugador de la NBA diagnosticado con esa enfermedad. 10 años después, ese sacrificio ha sido santo y seña de una dilatada carrera que ahora continuará en Zaragoza a las órdenes de Porfirio Fisac.
En opinión de nuestro técnico: “Wright domina los tiempos que necesita el grupo. Es un jugador que siempre antepone los intereses del grupo a los suyos personales, pero no sólo en la cancha sino también fuera de ella. Es capaz de anotar y de defender con garantías y tiene experiencia en Europa a buen nivel. Es un jugador que nos va a ayudar en las necesidades principales del equipo”, señaló Fisac.