Las Palmas de Gran Canaria, 23 abr. 2005 (EFE).- El Gran Canaria protagonizará mañana un choque inédito en la isla ante el Lagun Aro Bilbao, en el que se ha marcado el objetivo del triunfo para continuar una semana más entre los ocho mejores de la fase regular de la Liga ACB.
El único precedente oficial entre ambos equipos se jugó en la decimoséptima jornada del actual campeonato y en tierras vascas, donde triunfo acompañó a los pupilos de Pedro Martínez por 67-86, con el local Scott -23 puntos- y el visitante McDonald -17- como jugadores más sobresalientes.
Los canarios, que nunca han estado fuera de las ocho plazas de cabeza de la competición en esta campaña, vuelven a confiar en el fortín del Centro Insular de Deportes para acercarse a la barrera de las dieciocho victorias, que en la práctica suele asegurar participación en las eliminatorias por el título nacional.
Pedro Martínez es consciente de que sus pupilos no están en su mejor momento de forma, bien por las lesiones, rotaciones en la configuración de plantilla y, en la última semana, hasta por cesiones, pero afirmó que "tampoco estamos tan mal, disponemos de una buena clasificación y, lo que es más importante, dependemos sólo de nosotros para conseguir nuestros objetivos".
"Me gustaría que jugadores en concreto, como Gonzalo Martínez, estuvieran mejor físicamente. También otros han tenido en esta liga momentos mejores, por eso debemos asumir esa situación y, como es norma en nosotros, que el equipo esté por encima de las individualidades", comentó.
El entrenador barcelonés avisó que el Gran Canaria "sufrirá" para superar a un rival que está en un buen momento de forma y ha sido capaz de ganar en canchas de solera como Badalona, Alicante y Valencia.
Martínez consideró como determinante para las opciones de su equipo, que se decidirán por pequeños detalles, la recuperación del nivel defensivo, cualidad sobre la que se basan buena parte de sus dieciséis triunfos.
El Gran Canaria afrontará el choque sin lesionados y, salvo cambios de última hora, lo más normal es que utilice inicialmente su quinteto más socorrido, es decir, Keys, McDonald, Moran, Savané y Guerra. Para las rotaciones estarán Hernández-Sonseca, Gonzalo, Baldo, Klein y Esteller.
El Lagun Aro Bilbao Basket afronta el partido que le medirá mañana al Gran Canaria en el Centro Insular de Deportes de Las Palmas (18.00 horas H.I.) con el objetivo de alcanzar la cifra de doce victorias que prácticamente certificarían su permanencia en la liga ACB.
El brillante triunfo del pasado miércoles en La Casilla ante el Pamesa Valencia ha dejado a los de Txus Vidorreta dos triunfos por encima del descenso y a un paso de sellar definitivamente una salvación que el técnico bilbaíno prefiere alcanzar cuanto antes y por méritos propios antes que a través de terceros.
Por lo tanto, el entrenador del conjunto rojillo ha advertido que, a pesar de que la situación clasificatoria les es favorable, sus hombres saltarán a la cancha canaria "con toda la tensión" y dispuestos a sorprender a un rival que ganó con autoridad al Lagun Aro en Bilbao y que lucha conservar su plaza de "Playoff".
Vidorreta, no obstante, admite las dificultades que entrañará atacar a "una de las mejores defensas" de la liga -que cuenta con tres pívots como Savane, Hernández Sonseca y McDonald "que intimidan mucho"- además de defender el juego exterior y la dirección de su base Billy Keys.
La expedición vizcaína partió hoy hacia las islas con los once hombres de la plantilla disponibles, incluido un Frederic Weis ligeramente tocado físicamente pero que estará a disposición del técnico de Indautxu.
El pívot francés se resintió ayer de unas molestias en el tobillo que ya le afectaron la pasada semana pero que sin embargo no le impidieron completar ante el Pamesa su mejor encuentro desde que llegó a Bilbao el pasado verano.