Ramón Orosa. Bilbao, 19 dic. 2015 (EFE).- Los jóvenes talentos que está puliendo el Movistar Estudiantes, los anotadores Jaime Fernández y Dario Brizuela y el ala-pívot Juancho Hernangómez, han tomado este sábado Miribilla y han dado al equipo colegial un importantísima victoria ante el Dominion Bilbao Basket (85-91).
Ha sido un triunfo madrileño hasta sorprendente y labrado fundamentalmente en el último cuarto, ya que hasta entonces la iniciativa siempre ha corrido a cargo de 'los hombres de negro', con los visitantes haciendo la goma por detrás.
Pero una zona ordenada por Diego Ocampo en la prórroga ha cegado al inicio del último cuarto a los de Sito Alonso, que han estado más de cuatro minutos sin anotar y, además, han sido incapaces de parar a las jóvenes perlas estudiantiles.
Quizás el jugador clave del choque haya sido el donostiarra Brizuela (21 años; 12 puntos), que se ha echado a la espalda a su equipo como un veterano en los minutos finales.
Aunque han valorado más los madrileños Fernández (22; 26 y 27 de valoración), pieza clave para aguantar en el segundo cuarto y también al final; y Hernangómez (20; 11, 9 rebotes y 19), más acertado e influyente en los tres primeros cuartos.
Por el Dominion Bilbao, que ha repetido uno de esos apagones que tanto le lastraron al inicio de curso, buen partido global durante 30 minutos y malos diez. Con Clevin Hannah (11, 8 asistencias y 17) incapaz de deshacerse de la maraña defensiva madrileña en el último cuarto y Alex Mumbrú (15 y 5 rebotes) y Axel Hervelle (15 y 15) tratando al final de recuperar lo irrecuperable.
Aunque a punto estuvieron cuando lograron acercarse a dos puntos a 32 segundos del final (85-87), después de verse siete abajo a un minuto. Pero resultó definitivo el 10-26 que revolcó el choque (76-84) después del 66-58 del final del tercer cuarto. Un parcial que había lanzado un premonitorio 0-11.
Dos triples seguidos de Alex Suárez permitieron la primera escapada bilbaíno (12-4, 14,6) ante un Movistar Estudiantes que solo respondía a base de mates, cuatro seguidos para anotar sus ocho primeros puntos.
Y con un quinto, el tercero de Hernángómez (17-14), los colegiales frenaron un segundo intento de despegue de los negro (17-11, que dominaron el primer cuarto (19-16).
Aprovechó el Dominion la entrada a la cancha del gigante Begic para pegar un nuevo acelerón a un rival que empató nada más empezar el segundo cuarto (19-19) y hasta ponerse por delante (36-38), apoyado en la anotación de Fernández y el trabajo continuo de Mitchell y Hernangómez.
No obstante, otro triple de Suárez puso de nuevo por delante a los suyos y otro inmediatamente posterior de Todorovic permitió al conjunto vasco llegar de nuevo por delante al descanso (42-40).
El partido regresó de vestuarios igual que se fue a él, es decir, con el Dominon Bilbao Basket llevando la iniciativa y el Movistar Estudiantes siempre por detrás haciendo la goma.
De todos modos, la amenaza de un estirón definitivo local planeaba cada vez que los de Alonso se adelantaban ocho puntos, su máxima ventaja, que logró varias veces. La última, con el poderoso mate con el que Bertans finiquitó el tercer cuarto (66-58).
Fue el canto del cisne de los locales, que colapsaron al inicio del último cuarto y luego no pudieron aguantar el envite de los jóvenes talentos estudiantiles, que aire a su equipo en la parte baja de la tabla y complican al Dominion en el camino que pretendía empezar a tomar hacia la Copa del Rey.
85 - Dominion Bilbao Basket (19+23+24+19): Hannah (11), Bertans (10), Mumbrú (15), Alex Suárez (9) y Bogris (2) -cinco inicial-; Raúl López (4), Ruoff (7), Todorovic (3), Hervelle (15) y Begic (9).
91 - Movistar Estudiantes (16+24+18+33): Salgado (6), Tony Mitchell (9), Juancho Hernangómez (11), Martín (8) y Rey (6) -cinco inicial-; Jaime Fernández (26), Brizuela (12), Brandon Thomas (4), Bircevic (9) y Vicedo.
Árbitros: Juan Carlos García González, Jorge Martínez Fernández y Jacobo Rial. Eliminado por faltas, el local Raúl López (m.40).
Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de la Liga Endesa disputado en el Bilbao Arena de Miribilla ante unos 8.500 espectadores.