Madrid, 5 Mayo 2012 (EFE).- El Real Madrid quiere terminar la temporada regular de la mejor manera posible, es decir, ganando, aunque sea un mero trámite festivo, ya que sea cual sea el resultado el equipo tiene asegurado el segundo puesto en la clasificación de cara a los 'playoffs'.
El único que se juega algo es el Joventut, aunque sus posibilidades son tan escasas que ha permitido que la Liga desprogramara el partido del resto de la jornada y que se juegue en la matinal del domingo.
Para entrar en la lucha por el título los verdinegros deberían ganar al Real Madrid en el Palacio de Deportes y que perdieran Lucentum, CAI Zaragoza y Unicaja, los tres. Complicado.
La filosofía de Pablo Laso, entrenador del Real Madrid, es jugar un buen partido ante el Joventut. A ritmo y sin guardar nada en cuanto a entrega y físico, porque 'desenchufar' al equipo es sencillo, pero volverlo a conectar no siempre es posible.
Por eso y ante la inminencia de la primera eliminatoria de cuartos de final (17 o 18 de mayo, al mejor de tres partidos), lo único que puede hacer el Madrid, a la espera de conocer al que será su rival, es no levantar el pie del acelerador.
Además, el equipo madrileño quiere seguir ofreciendo espectáculo a sus seguidores y, por supuesto, una victoria más en casa, donde sólo el Gescrap Bizkaia salió victorioso esta temporada en Liga.
Laso tendrá a todos sus jugadores en liza para el partido, toda vez que Nole Velickovic ya parece haber superado las pequeñas molestias de la rodilla que le han impedido tener el ritmo adecuado a lo largo de muchas fases de la temporada.
"Velickovic está bien y llega a la parte final de la temporada en las mejores condiciones físicas del año. Nos va a ayudar mucho y en este sentido es una especie de fichaje para la lucha por el título", comentó Pablo Laso.
El FIATC Joventut deberá ganar mañana en la pista del Real Madrid (12.30 horas) y esperar que pierdan Lucentum Alicante, CAI Zaragoza y Unicaja para continuar vivo en la Liga ACB y disputar las eliminatorias al título.
Así de simple y a la vez complicada que se dé es la carambola que necesitan los de Badalona -novenos en la clasificación- para meterse entre los ocho mejores de la liga regular.
Los verdinegros han hecho méritos, por juego y resultados, en el tramo final de la fase regular para estar entre los ocho primeros al ganar cuatro de sus últimos cinco partidos, pero la mala primera vuelta ha impedido que mañana dependa de sí mismo.
Salva Maldonado cuenta para mañana con toda su plantilla para el choque ante el equipo blanco, que no se juega nada, al que ya ganó en la primera vuelta en Badalona (78-75).
El equipo verdinegro tiene motivos para creer que puede ganar al Real Madrid en su pista -no lo hace desde abril de 2008- tras derrotar en el Buesa Arena al Caja Laboral hace una semana (66-68) y vencer al Lucentum Alicante el pasado miércoles en Badalona (74-63).
Se encontrará con un rival que viene de perder el clásico ante el Barcelona Regal (86-83) tras hacer un buen partido que le ha reforzado en su idea de que pueden plantar cara al actual campeón en una hipotética final.
Jugando sin la presión de la clasificación (el objetivo era la permanencia), el equipo catalán ha ofrecido su mejor versión en estas últimas jornadas coincidiendo con el resurgir de Pooh Jeter, la regularidad de Latavious Williams y la experiencia de Eulis Báez.
Latavious Williams, uno de los mejores debutantes del campeonato, intentará aprovechar el escaparate que supone jugar contra el Real Madrid, para seguir confirmando las enormes posibilidades que atesora y elevar su cotización para la próxima campaña.
El equipo que ponga la intensidad en el juego será el que tenga más posibilidades de llevarse el triunfo. La 'Penya' lo consiguió en el partido jugado en Badalona, lo que le permitió llegar al final del encuentro con opciones siendo Albert Oliver el que decidiera el choque.
Será el partido número 83 que madridistas y verdinegros juegan en la cancha merengue. Los badaloneses solo han ganado en trece ocasiones a lo largo de la historia.