ViveMenorca y CAI afrontan su duelo inédito en ACB con distintas rachas

Mahón (Menorca) /Zaragoza, 15 Nov. 2008 (EFE).- El ViveMenorca disputará este domingo ante el CAI Zaragoza un partido trascendental, en el que el equipo que prepara Ricard Casas -último clasificado de la ACB con una victoria y seis derrotas- necesita imperiosamente ganar para acabar con esta crisis de resultados.

La preocupación existe entre la afición isleña y la mala racha de resultados provoca que el euipo local tenga que dar un salto cualitativo ante los maños para volver a tener opciones como las tuvo ante el TAU Cerámica, DKV Joventut o Kalise Gran Canaria.

Los insulares repiten el peor arranque liguero de las temporadas 2005-06 y 2007-08 en las que sólo ganaron un partido en siete jornadas. Esta dinámica peligrosa obliga al ViveMenorca a jugar con una presión añadida, ya que el lastre de derrotas obliga al equipo a cometer errores.

Desde la temporada anterior, jornada 28, en la que derrotó al Murcia por 87-79, sólo han ganado otro partido: el correspondiente a la quinta jornada del presente curso disputado el pasado 26 de octubre, derrotando al Pamesa Valencia por 70-62. Los otros doce encuentros restantes, entre los seis de la temporada pasada y seis de ésta los ha saldado con derrotas.

El entrenador del ViveMenorca, Ricard Casas, comprende la preocupación. "En mi trabajo siempre eres cuestionado pero no voy a tener más presión porque la que yo me marco ya es suficientemente exigente como para que ahora aumente por los comentarios que se puedan realizar. A mí sólo me interesa la valoración propia del trabajo y la de mi equipo de colaboradores". El entrenador reconoció que esta semana "no ha sido normal desde el momento en que todo el mundo habla y opina. Yo personalmente tengo las cosas claras: a todos nos interesa ganar por el bien del equipo, así que respeto cualquier opinión pero no me harán cambiar en mi trabajo y en mi línea de actuación porque es la adecuada", dijo.

Sobre el CAI Zaragoza, Casas piensa que "es un equipo recién ascendido al que este éxito le ha dado seguridad para competir. Juegan con momentos de positivismo y rachas contando con un juego de perímetro muy peligroso en el que basan gran parte de su producción ofensiva, aunque también tienen jugadores interiores de gran calidad y prestigio en la competición", apuntó.

En el otro lado, el cuadro visitante pretende aprovechar el delicado momento de juego y resultados que atraviesan los menorquines para sumar su cuarta victoria de la temporada, que les permitiría alejarse de la zona de peligro de la clasificación.

Los zaragozanos no han desaprovechado sus dos partidos consecutivos en casa ante MMT Estudiantes y Ricoh Manresa para sumar dos nuevos triunfos a su casillero que le permiten no verse agobiados por la necesidad cuando se va a cumplir el primer cuarto de la competición.

El conjunto que entrena Curro Segura podría incluso, logrando el triunfo en Mahón, hacerse un hueco entre los ocho primeros clasificados y meterse en la pelea por clasificarse para la Copa del Rey.

El equipo rojillo parte con la ventaja de que su técnico conoce a la perfección los entresijos del club menorquín, en el que estuvo casi cinco años, y del apoyo que ofrece en todo momento la afición a su equipo, donde "cada canasta parece un parcial grande y hay presión real del público".

El técnico visitante, también recordó que los menorquines llenan las cinco mil localidades de su pabellón cada partido. "Da igual el rival que sea y animando desde el primer minuto hasta el último, esté como esté el marcador".

En su opinión el conjunto menorquín en su pista está ofreciendo un buen nivel de competitividad pero "no en cuanto a resultados al final". Por eso "tienen mucha presión por la situación que tienen de una sola victoria y eso es un arma de doble filo. Seguro que van a salir muy fuertes, a tope, y si el partido va de cara van a jugar con confianza y si no es así, probablemente lo podamos aprovechar".

De la plantilla que dirige Ricard Casas destacó al alero croataMario Stojic como"el alma del equipo", así como los estadounidenses Bud Eley y Pooh Jeter: "Son muy importantes en su estructura de ataque y Marino Bazdaric está anotando con facilidad".

El técnico granadino reconoció que para él este partido es "especial", en su vuelta a Menorca donde estuvo cinco años de los que guarda "muy buenos recuerdos y será un poco distinto".