Murcia/Manresa, 22 dic. 2007 (EFE).- El Polaris World Club Baloncesto Murcia recibe mañana al Ricoh Manresa con las sensaciones de siempre, es decir, consciente de que en su pista es un equipo poderoso que ha sido capaz de ganar cinco de sus seis partidos como local, pese a que como visitante ha perdido en sus seis desplazamientos.
El encuentro presenta a un Polaris World CB Murcia, duodécimo clasificado, casi resignado a que fuera de casa no tiene nada que hacer, aunque fortalecido por la forma en que solventa sus encuentros con su afición de por medio.
No en vano, sólo el Real Madrid se ha llevado el triunfo esta temporada de un pabellón por el que ya han pasado equipos punteros como el TAU Cerámica, el Akasvayu Girona y el sorprendente iurbentia Bilbao Basket.
Manolo Hussein, quien podrá contar con todos los jugadores de su plantilla, hizo referencia en referencia a esa trayectoria tan dispar del equipo en función de que sea local o visitante.
"Aquí tenemos la sensación de que jugamos con más seguridad, con más confianza en nosotros mismos, así que esperemos que se confirmen esas percepciones. Cada vez es más importante ganar en casa, puesto que no somos capaces de hacerlo fuera, a pesar de lo cual en todo caso no creo que haya ansiedad, pero sí obligación y mayor responsabilidad para no fallar en el palacio", explicó.
Tras la última derrota por 78-65 en la pista del Cajasol, y ya centrado en el compromiso de mañana, el técnico canario reconoció que el choque ante el Ricoh Manresa "es un partido trampa", y avisó de la importancia de "respetar mucho al rival, pues en el momento en el que pensemos que no vamos a perder en nuestra cancha, posiblemente nos llevemos un susto".
El pívot del Ricoh Manresa Josh Asselin, uno de los máximos anotadores de la Liga con un promedio de 13,1 puntos, seguramente será baja en Murcia por lesión, cuestión que Hussein considera importante, aunque no decisiva.
Hussein destacó del Ricoh Manrea que "tiene espíritu guerrero con hombres como Alzamora y Guillem Rubio y una propuesta de juego muy atractiva y también arriesgada. No elaboran demasiado el juego, pero son muy agresivos y aprovechan los errores de los rivales para castigarlos con un baloncesto rápido y dinámico, con tiros arriesgados, pero siempre con un juego muy vivo".
Por su parte, el Ricoh Manresa tiene el reto de superar la mala racha que atraviesa, con seis derrotas en los últimos siete partidos. Además, el conjunto catalán contará con el handicap de tener a varios jugadores lesionados o con problemas físicos a lo largo de la semana.
El equipo catalán espera recuperar para mañana a Matt Walsh, que durante los últimos días ha empezado a entrenar con mayor intensidad. El norteamericano se hizo un esguince en un tobillo contra el AXA FC Barcelona, lo que le obligó a perderse el partido ante Granada. El técnico de Ricoh Manresa, Jaume Ponsarnau, confía que estará a punto, aunque no se sabe si podrá jugar al cien por cien.
Por otro lado, quién tiene más posibilidades de no jugar en la pista del Murcia es Josh Asselin, que se están recuperando de una contusión lumbar. La baja de Asselin es más grave aún, si tenemos en cuenta que en las filas del Polaris World milita el segundo máximo reboteador de la competición, Juanjo Triguero.
Por si estas dos bajas no fueran suficiente, esta semana Javi Rodríguez, Rafa Martínez y Alfons Alzamora, también han tenido problemas físicos. Además de una indisposición de Jordi Grimau. Todos ellos, sin embargo, podrán jugar, a no ser que aparezcan nuevos problemas.
Más allá del partido, el Ricoh Manresa tendrá la oportunidad de volver a la ciudad donde ganó la Copa del Rey del 1996.