Mahón (Menorca)/Madrid, 27 ene. 2007 (EFE).- El ViveMenorca se ha preparado durante esta semana para dar la que sería una de las mayores sorpresas de la presente temporada, derrotar al líder de la Liga ACB, el Real Madrid, en el partido que disputarán mañana.
ViveMenorca y Real Madrid se verán en la decimonovena jornada de la liga ACB, que se disputará a partir de las 12:30 horas en el Pabellón Menorca, de Mahón, que registrará el noveno lleno consecutivo.
En el encuentro debutará el pívot norteamericano Jelani McCoy, de 29 años y 2,08 de altura, campeón de la NBA con Los Angeles Lakers.
La peligrosa situación de los mahoneses, que cierran la tabla con cuatro victorias y catorce derrotas, ha obligado a la entidad menorquina a tener que tomar la decisión de prescindir del pívot estadounidense Sam Clancy, de 2'02 metros por su compatriota McCoy.
Con la llegada de McCoy, el entrenador Ricard Casas pretende que su equipo tenga más equilibrio en el juego interior, que registraba muchas carencias.
La falta de puntos desde la zona, unido al poco bagaje en el rebote, hacía del ViveMenorca un equipo muy vulnerable.
Sin embargo, el entrenador no podrá contar con el base comunitario Rod Brown debido a una pequeña lesión.
Ante este encuentro, los menorquines parten como víctimas pero conscientes de que no tienen nada que perder y mucho que ganar ante los blancos, por lo que se ha generado gran expectación la llegada del líder, que en Menorca se cree podría estar pensando más en la Copa que en la Liga.
A la cita con el Real Madrid, el ViveMenorca llega tras ganar su primer partido del presente ejercicio lejos de su pabellón, al derrotar en el "Pisuerga" al Grupo Capitol Valladolid por (72-79), por lo que anímicamente los jugadores saldrán más motivados.
Los menorquines, no obstante, no ganan ante sus aficionados desde el pasado 16 de diciembre, cuando derrotaron al Bruesa GBC en un intento por llegar al objetivo final de la permanencia.
Los precedentes entre los dos equipos, que tienen objetivos bien diferentes, son claramente favorables al Madrid.
Se han enfrentado desde la temporada anterior en tres ocasiones, en las que siempre ganó el Madrid.
El último partido entre los dos equipos fue el 12 de octubre en Vistalegre, donde el líder venció ampliamente por (107-78). Casas cree que el Real Madrid tiene un equipo extraordinario pero que es batible.
Respecto de McCoy, el entrenador señaló que "ha realizado sólo dos entrenamientos y se espera de él que empiece a aportar de forma inteligente desde el primer partido".
"Para ello -agregó- el equipo debe ayudarle con su compromiso colectivo. Esperamos que pueda intimidar en defensa, capturar rebotes y ayudarnos a tener más equilibrio en ataque, donde los exteriores deberán dar más balones dentro".
La semana ha sido un poco "atípica", según el entrenador, por el cambio de jugador, que se produjo, precisó, "por necesidades tácticas del equipo, no por la falta de calidad o compromiso de Clancy, que es un gran jugador".
Del Real Madrid destacó que "no tiene puntos débiles, porque si se encuentra algún detalle táctico por el que incidir, lo suple con la calidad individual de todos sus jugadores".
"Por algo -continuó- llevan sólo dos derrotas y anotan más de 80 puntos por partido. Pero tranquilos, se les puede ganar y jugaremos para lograrlo".
El entrenador pidió a la afición que "siga apoyando, como siempre. Ellos son ese punto más de competitividad que tenemos en casa y que necesitamos para llevar el partido al límite y lograr la victoria. El inicio será muy importante", concluyó.
Por su parte, el Real Madrid, líder de la ACB, visita la cancha del colista, ViveMenorca, en uno de esos partidos trampa, en los que parece que la victoria está clara y que, sin embargo, se puede complicar a poco que el equipo madridista no se emplee al máximo.
El Real Madrid, tras recuperar el liderato en Vitoria, vuelve a caminar sin aparente titubeo por la senda del triunfo en la ACB, pero deberá no descuidarse lo más mínimo, ante un ViveMenorca que necesita imperiosamente ganar para abandonar el último puesto de la clasificación.
Los menorquines presentan cambios, con la llegada de Jelany Mc Coy en sustitución de Sam Clancy, pero el Real Madrid también hará lo propio. Marco Milic apenas jugó tres minutos en el debut de su segunda época en el club y a Menorca ha viajado el nuevo jugador del equipo, el pívot Blagota Sekulic.
Milic, tras una semana de entrenamientos con sus nuevos compañeros, es de esperar que ya comience a ayudar al equipo, mientras que del pívot montenegrino de 2.09 metros apenas se espera que pueda debutar con el equipo, pues sólo se ha entrenado un par de veces a las órdenes de Joan Plaza.
Por primera vez en la temporada, el entrenador del Real Madrid pudo conceder dos días de descanso a sus jugadores, esta semana, aunque algunos prefirieron sólo tomarse uno y seguir trabajando para no perder ritmo. Este es uno de los secretos del Real Madrid de esta temporada: pasión, ambición y trabajo sin límites y sin egoísmos.
De todas formas, el partido puede torcerse si Joan Plaza y sus jugadores no se emplean a fondo. Se enfrentan al último de la clasificación, en una cancha a rebosar y ante un equipo con poco que perder, mucho que ganar y con la necesidad imperiosa de reaccionar. El clásico partido trampa.