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Ricoh Manresa - Pamesa Valencia, con Casas como protagonista

Ricard Casas vuelve a Manresa con un Pamesa invicto y deseoso de seguir siéndolo. El espíritu de "Nou Congost", aliado local

Ricard Casas regresa a Manresa (Foto EFE)
© Ricard Casas regresa a Manresa (Foto EFE)
  

Manresa (Barcelona), 22 oct. 2005 (EFE).- El Ricoh Manresa intentará mañana resarcirse de la mala imagen mostrada en Badalona, donde el jueves perdió por 89 a 68. Para ello el equipo catalán echará mano de su fortaleza en los partidos en el Nou Congost, e intentará romper la calidad de invicto del Pamesa Valencia de Ricard Casas, quien hasta la temporada pasada ocupó el banquillo manresano.

Para conseguirlo deberá aumentar los números de los pivotes, Ricci y Patterson, además del esloveno Marko Maravic, que aún no ha aportado todo lo que se espera de él. Además, la afición manresana espera volver a disfrutar del mejor Albert Oliver, que lideró la victoria ante Unicaja, en la primera jornada.

El inicio de la liga es frenético con muchos partidos, esto ha hecho al Manresa subir y bajar en pocos días. De la trabajada victoria ante el Unicaja de Málaga, a la derrota sin opciones ante el DKV Joventut.

El entrenador del Ricoh, Xavier Garcia, explicó que "la parte buena es que hay poco tiempo para pensar en la derrota". García comenta que después de la visita a Badalona "tenemos que recuperar la mentalidad del equipo que hemos sido durante toda la pretemporada y que debemos ser toda la temporada".

En este sentido, el pivote del Ricoh, Guillem Rubio, considera que "el partido de Badalona ya lo tenemos superado".

Ante el equipo 'taronja', el técnico del Manresa explicó que "para intentar tener opciones tenemos que hacer una muy buena selección del juego en ataque y tener mucha disciplina de juego". Rubio apuntó también que "debemos ser nosotros mismos, estar fuertes en defensa y aprovechar nuestras virtudes en ataque".

El Pamesa Valencia, que acumula dos victorias en otras tantas jornadas de la Liga ACB, visita mañana domingo la pista del Ricoh Manresa, que fue durante catorce temporadas el club de Ricard Casas, actual técnico del conjunto valenciano.

El regreso del entrenador catalán a Manresa marcará el encuentro puesto que apenas hace unos meses que rechazó la oferta de renovación del Ricoh, en cuyo renacimiento fue pieza clave, y se decidió por la oferta del conjunto valenciano.

Casas espera poder dejar a un lado el componente sentimental del partido y guiar al Pamesa a su tercera victoria consecutiva, tras haber derrotado al Leche Río Breogán en la Fuente de San Luis y al Unicaja Málaga en el pabellón Martín Carpena.

En esas dos primeras jornadas de la competición, el conjunto valenciano ha mostrado una buena defensa, que ha servido de base para vencer, pero ha tenido lagunas ofensivas que deberá mejorar con el paso de las jornadas.

Para este encuentro, Casas mantiene la duda de Víctor Luengo, al que no pudo utilizar en el choque del pasado jueves en Málaga al haber sufrido un esguince en el tobillo izquierdo en el partido ante el Breogán. Será baja de nuevo el alero Oscar Yebra por un esguince articular en el hombro derecho.

El equipo valenciano afronta este encuentro después de que la pasada campaña, en un encuentro intrascendente, lograra un triunfo en el Nou Congost que acabó con una racha de catorce años sin ganar como visitante en aquella pista.

"No sé cómo me recibirán allí los aficionados, pero independientemente de cómo lo hagan les estoy agradecido, allí es donde he nacido y donde me he hecho", explicó a Efe Ricard Casas.

El entrenador del Pamesa está convencido de que será un choque especial para él por la identificación que tiene con la entidad y con muchos de sus jugadores.

"Es un partido especial para mí porque es un club en el que me formé, en el que me dieron una oportunidad y en el que me he sentido querido y apoyado", señaló a Efe el entrenador catalán.

"Tengo una gran identificación con Manresa, el balance de mi etapa allí es muy positivo. Es muy importante para un entrenador sentir que eres respetado en un lugar del que te has ido y que hay una sensibilidad muy especial entre las dos partes que espero que pueda durar siempre", añadió.

El entrenador del Pamesa confesó que no sabe cómo va a sentirse, entre otras cosas porque es la primera vez que se enfrenta al Manresa, "pero no quiero preocuparme porque no me va a servir de mucho y porque tengo que estar centrado en el partido", agregó.

Casas se mostró muy contento de que el Manresa mantenga su apuesta por gente de la casa, tanto en la plantilla como en el cuerpo técnico.

"Conozco a algunos de los jugadores desde que eran niños y eso es especial. Me alegró de que haya jugadores de la casa. Yo he sido segundo entrenador, preparador físico y entrenador y todo esto te alegra porque en una parte grande o pequeña has podido ayudar a que exista", señaló.

Otro de los aspectos destacados del encuentro del domingo será el duelo que mantendrán en los banquillos Casas y Xavier García, que fue durante cuatro años su entrenador en el conjunto catalán y que ahora es el máximo responsable del equipo.

"Tengo una muy buena relación con él. Es un entrenador muy buen conocedor del baloncesto, con ideas muy claras y muy definidas, joven y con buena capacidad", resumió.

Casas no se mostró preocupado porque el Nou Congost sea una pista que tradicionalmente no se le ha dado bien al Pamesa, pese a que ganó allí la pasada campaña.

"Somos un equipo muy nuevo, es una pista difícil para el Pamesa y para todos los que vayan. Hemos de estar metidos en el partido y estar regulares en los aspectos de esfuerzo", afirmó.

Casas auguró que el Manresa pondrá todo su espíritu de lucha en la pista donde espera un choque "difícil, rápido y con momentos complicados en el que hemos de estar listos en cómo usar nuestro físico", concluyó.