Barcelona, 28 may. 2005 (EFE).- El DKV Joventut deberá ganar mañana al Real Madrid en el Palau Olímpic de Badalona para alargar la serie hasta el martes e intentar eliminar al Real Madrid en el quinto partido de la eliminatoria de cuartos de final.
Con la eliminatoria 2-1, los badaloneses deberán recuperar el nivel del segundo partido para evitar que el renacido Real Madrid que se vio en el tercer encuentro no finiquite la eliminatoria con su tercera victoria.
Tendrá que ver cómo reaccionan los hombres de Aito García Reneses 48 horas después de perder por veinte puntos (90-70) en el Palacio Vistalegre, en un partido en el que los badaloneses nuevamente dominaron a su rival pero en el que se vieron superados en la segunda parte.
La Penya deberá ser consistente defensivamente bajo los aros aunque uno de sus principales baluartes, Venson Hamilton, no está al cien por cien de sus posibilidades. Los badaloneses cogieron 12 rebotes menos que los madridistas en el partido del pasado viernes.
El equipo de Aito García Reneses jugó su peor baloncesto, sobre todo en el último período, en el partido clave de la eliminatoria. Su falta de rebote ofensivo agravó su poco acierto en el lanzamiento exterior. Ello permitió que el Real Madrid impusiera su ritmo y que se hiciera con el partido decisivo de la eliminatoria.
Precisamente, la velocidad a la que se juegue el partido se antoja una de las claves del encuentro de mañana. El DKV Joventut sufre mucho, por su inferioridad física, en el cuerpo a cuerpo cuando el partido transcurre a un ritmo de 70 puntos, como sucedió el viernes.
En Badalona, el DKV Joventut arrolló a su rival dominando el rebote y jugando al contragolpe. Se vio entonces a un Real Madrid sin recursos para hacer frente al vendaval del equipo catalán.
Parar a Felipe Reyes -Sean Rooks parece el único capaz de conseguirlo- y a Louis Bullock -nueva misión para Paco Vázquez- pueden ser determinantes para que los aficionados puedan disfrutar el próximo martes del definitivo encuentro entre dos clásicos del baloncesto español.
Bozidar Maljkovic, entrenador del Real Madrid, no quiere dejarse "llevar a engaño" por la victoria en el tercer partido de la serie y es consciente de la dificultad que tendrá su equipo para acceder a semifinales y conseguir la, según su criterio, "merecida" participación en la Euroliga.
"La ventaja con la que nos impusimos en el tercer partido (2-1), aunque espero que nos aporte una buena dosis de moral para afrontar el siguiente partido de la serie contra el Joventut, no nos puede ni nos debe llevar a engaño", comentó Maljkovic.
"El DKV Joventut sigue siendo un equipo de grandísima calidad y, por tanto, a no ser que repitamos una actuación como la del último encuentro, con plena concentración, unión y dedicación defensiva y de control del rebote, se nos pondrán las cosas muy cuesta arriba para pasar a semifinales", añadió.
El equipo seguirá contando con la baja del pívot irlandés Pat Burke, que sufre una dorsalgia desde el pasado miércoles y que ya no pudo disputar en último encuentro.
Por contra, en el último partido el capitán Alberto Herreros debutó y no se ha resentido de su reciente operación en el dedo índice de la mano derecha, por lo que podrá aportar su experiencia en estos trascendentales choques.
Si el Real Madrid se clasifica para las semifinales se asegurará una plaza en la Euroliga, "una competición en la que consideramos que debemos y merecemos estar la próxima temporada".