El Pamesa Valencia quiere acercarse a la Copa a costa del Lagun Aro Bilbao

Valencia, 19 nov. 2004 (EFE).- El Pamesa Valencia recibe mañana en la Fuente de San Luis al Lagun Aro Bilbao, ante el que quiere sumar su cuarta victoria consecutiva y ante el que debe mejorar la mala imagen que ha ofrecido en los últimos encuentros.

El equipo valenciano ha doblegado en sus recientes partidos al Hapoel Jerusalén, al Plus Pujol Lleida y al Ovarense Aerosoles, pero ante sus dos últimos rivales ha ofrecido un juego pobre, especialmente en la parcela defensiva.

Los nervios comienzan a crecer dentro de la entidad valenciana, que necesita que la cuarta victoria consecutiva del equipo que dirige Pablo Laso llegue acompañada de un juego mucho más consistente.

Esta situación ha acelerado la búsqueda de refuerzos para una plantilla que en pocos días sufrirá una nueva reestructuración por la marcha de Alvin Jones, la posible salida de Robert Archibald, el regreso de Dejan Tomasevic y la consecuente baja para la Liga ACB de Jermaine Jackson.

En medio de este baile de nombres, el Pamesa recibe al recién ascendido Lagun Aro Bilbao, un equipo necesitado de victorias, ya que hasta el momento sólo ha conseguido dos en los nueve encuentros disputados.

El choque permitirá el retorno a la Fuente de San Luis del escolta José Luis Maluenda, que durante siete temporadas fue jugador del club valenciano, ante el que ya se enfrentó como local cuando estuvo cedido en el Jabones Pardo Fuenlabrada.

El conjunto que dirige Txus Vidorreta sólo ha vencido en uno de sus cuatro partidos como visitante, pero perdió de un punto en la prórroga en la pista del Granada (78-77) y en la del Casdemont Girona cayó por un lejano triple de Terrel Myers en el último segundo del encuentro (109-107).

Después de haberse entrenado los últimos días con el resto del grupo, el pívot serbio Dejan Tomasevic ha regresado a la convocatoria después de dos meses de baja por una osteocondritis en el tobillo.

Por su parte, el Lagun Aro Bilbao Basket visitará mañana el pabellón Fuente de San Luis de Valencia (19.30 horas) consciente de la dificultad que entraña medirse a uno de los equipos más fuertes de la ACB, el Pamesa, pero con el objetivo de "competir" durante los cuarenta minutos para apurar sus opciones de triunfo.

Las secuelas físicas y mentales que ha dejado en la plantilla de Txus Vidorreta la inapelable derrota encajada la pasada jornada ante el co-líder Etosa Alicante, la cuarta consecutiva y quinta de la temporada, serán el principal escollo que deba salvar el equipo rojillo para buscar la sorpresa en cancha valenciana.

El técnico bilbaíno no podrá contar al menos durante tres semanas, por una rotura muscular, con el serbio Pedja Savovic, a quien la directiva vizcaína busca urgentemente sustituto de cara sobre todo al decisivo mes de diciembre que le espera al Lagun Aro Bilbao.

Además, Lucho Fernández sufrió durante un entrenamiento un choque fortuito con el hombro de Richard Scott y necesitó once puntos de sutura, un nuevo contratiempo que hace que Vidorreta se conforme con que el ala-pívot gallego pueda "ayudar" durante algunos minutos a sus compañeros.

A pesar de las dificultades para trabajar con cierta normalidad que semana a semana viene soportando el Lagun Aro a causa de las lesiones, el entrenador de Indautxu confía en que tarde o temprano comiencen a llegar las victorias que se le han negado hasta ahora al equipo bilbaíno.

"La competición no ha sido justa pero debemos intentar que lo sea a base de trabajo", afirmó Vidorreta, quien, sobre su rival, consideró que el Pamesa Valencia "comienza a tener cara y ojos" después de un arranque de liga irregular a causa de los continuos problemas físicos de varios de sus jugadores.

"Es un plantillón que tiene que aspirar a todo. Es un equipo que basa su calidad en un quinteto en el que anota cualquiera. En ataque posicional tienen armas suficientes para desequilibrar, pero también disponen de jugadores rápidos. Así que debemos tratar de evitar el contraataque", explicó el técnico.

Vidorreta tuvo palabras de elogio para su colega en el banquillo valenciano, Pablo Laso, a pesar de disponer de "pocas referencias como entrenador". "Haber sido un base director en la ACB es el primer paso para ser un gran entrenador", afirmó Vidorreta.