Vitoria-Gasteiz, Madrid, 4 Oct. 2017 (EFE).- El Baskonia buscará este jueves en el Buesa Arena su primer triunfo de la temporada en el debut del Movistar Estudiantes este curso tras su clasificación para la Basketball Champions League.
Los azulgranas afrontan el segundo encuentro de la nueva campaña tras la derrota cosechada en Barcelona, mientras que los colegiales se estrenan en la Liga Endesa tras aplazar la primera jornada por su compromiso europeo.
El envite tendrá el aliciente del debut de Pablo Prigioni como técnico en el coliseo baskonista que precisamente mantiene en lo alto el dorsal 5 que el exjugador argentino lució durante gran parte de su carrera.
Por otro lado, otro de los focos estará sobre el base uruguayo Jayson Granger, que en su regreso a la Liga Endesa vuelve a medirse al equipo en el que se formó y con el que debutó en la competición.
En principio Salva Maldonado podrá contar con todos sus hombres, situación que no ha podido vivir esta temporada el Baskonia, que cuenta con dos bajas seguras, Jordan McRae y Patricio Garino, y mantiene la duda de Rodrigue Beaubois y Tornike Shengelia.
El francés se encuentra en la recta final de su recuperación, pero el club quiere se cauto con su debut ya que no ha disputado ningún partido en la preparación baskonista.
El capitán azulgrana, por su parte, ha llevado a cabo una veloz recuperación del esguince de tobillo que sufrió cuatro días antes del inicio de la competición y, como Beaubois, será duda hasta última hora.
La historia sonríe al equipo de Pablo Prigioni en los enfrentamientos que ha mantenido su equipo con el Movistar Estudiantes, ya que en las 14 últimas visitas madrileñas, han superado en 13 a los estudiantiles.
La última victoria del equipo de Salva Maldonado fue en la temporada 2012-13, cuando los del Ramiro de Maeztu se impusieron por 80-90 en la Jornada 33 del curso.
El Movistar Estudiantes afronta esta nueva campaña con un equipo muy diferente al del año pasado y en el que destacan fichajes como Sylven Landesberg, procedente del Maccabi FOX Tel Aviv, y Nik Caner-Medley, que ha protagonizado un ilusionante regreso al equipo donde estuvo hace seis años.
Los colegiales viajan a Vitoria-Gasteiz para enfrentarse al Baskonia e intentar acabar con la maldición del Buesa Arena en el que han perdido en 12 de las últimas 13 visitas realizadas.
El equipo madrileño se estrena en la Liga Endesa, tras haber aplazado su encuentro de la primera jornada ante el Divina Seguros Joventut por su participación en la fase previa de la Basketball Champions League.
Precisamente su clasificación para la fase de grupos de esta competición europea ha sido un gran espaldarazo, aunque fuese en la prórroga, para la moral de los colegiales que han puesto mucho interés en esta competición como paso importante para su crecimiento deportivo y económico.
Dicho esto, Movistar Estudiantes es consciente de la dificultad que entraña su debut en la Liga Endesa ante uno de los grandes y en su cancha, máxime después de su derrota en Barcelona y de estrenarse ante sus aficionados.
Pero también es cierto que en estos inicios de temporada es cuando las diferencias entre equipos de distinto nivel pueden ser más cortas.
Movistar Estudiantes saldrá a jugar sin complejos buscando optimizar sus armas ante un Baskonia que tendrá las bajas de McRae y Garino y las dudas de Beaubois y Shengelia. Salva Maldonado, el entrenador de los colegiales, podrá contar con todos sus jugadores.
Los dos partidos ante el Donar Groningen, además del esfuerzo adicional y del refuerzo moral, han servido para que las piezas comiencen a encajar en el engranaje del equipo y para ver los aspectos del juego en los que hay que hacer un trabajo más directo e inmediato.
El club madrileño ha hecho un gran esfuerzo en la confección de la plantilla y se ha marcado unos ambiciosos objetivos -Europa, Copa del Rey y Playoff- y aunque el Baskonia no sea un rival "de su Liga" una victoria o un buen partido en el Buesa Arena puede ser más importante de lo que se piensa, sobre todo en el inicio de la temporada.