El ICL Manresa quiere reencontrarse con la victoria tras el parón copero

Manresa/Fuenlabrada, 27 Feb. 2016 (EFE).- El ICL Manresa intentará reencontrarse este domingo con la victoria después del parón de la Copa del Rey ante el equipo que más ha sorprendido esta temporada, el Montakit Fuenlabrada, que visita el Nou Congost.

Los catalanes llevan 7 victorias y sienten el aliento de sus perseguidores en la zona baja de la clasificación. Por ello, el entrenador de los del Bages, Ibon Navarro, ha remarcado que conseguir la victoria este domingo y en el siguiente partido, también en casa, sería importante. "Mandaríamos dos mensajes: que estamos bien y que aquí va a ser muy difícil que nos ganen", ha agregado.

Sin embargo, se lamenta que "desgraciadamente en todo el año, solo hemos ganado tres partidos en casa". Por ello, ha pedido el apoyo de la afición. "Si todos queremos seguir disfrutando de esto, necesitamos ayuda. Solos no lo vamos a hacer porque esto va a ser muy duro, muy duro", ha puntualizado.

El partido contra los de Jota Cuspinera se presenta muy complicado para el ICL. Navarro ha recordado que "viene a jugar uno de los ocho primeros equipos de la liga, contra los que no ganamos nunca y contra los que nos cuesta mucho competir. Va a ser muy difícil ganar por el estilo de juego que tienen ellos, pero tenemos que intentarlo".

El técnico del Manresa ha destacado que su próximo rival "tiene jugadores muy buenos" y ha subrayado que "han acertado mucho con la configuración del equipo y en elegir cómo jugar", especialmente, "a nivel anímico y mental".

Navarro tendrá a todos los jugadores disponibles ya sin Ricky Sánchez y Jermaine Thomas, desvinculados en los últimos días, y con el recién llegado Lluís Costa, que podrá debutar en la Liga Endesa.

Sobre el nuevo director de juego, el entrenador ha asegurado que "sabe jugar, es listo, tiene lo que debe tener un base de los antiguos" y ha elogiado que "sin ser un gran anotador, tiene buena capacidad de pase".

Por su parte, el conjunto madrileño buscará su duodécima victoria de la temporada, el objetivo que se había marcado el técnico José Ramón Cuspinera desde el inicio del curso para la permanencia, aunque viajen a una cancha en la que no vencen desde 2006.

Son ya ocho visitas del conjunto madrileño con derrota a Manresa, donde se proclamaron vencedores por última vez en mayo de 2006. Por ello, la cautela es la norma para relativizar la diferencia en la tabla de la Liga Endesa, en la que el sorprendente Fuenlabrada es sexto con once triunfos, mientras que su rival de mañana es decimotercero con siete victorias.

"El ICL Manresa lleva una muy buena primera vuelta de Liga y sé que tienen marcado en el calendario este partido como uno de los ganables. Vamos a ver cómo reaccionamos después de la Copa ante un rival que se está jugando la vida, como nosotros también, para asegurar la permanencia", apuntó Cuspinera este viernes.

Los naranjas, que aseguran estar dispuestos a "reengancharse" a la Liga tras el paréntesis copero en A Coruña, han intercalado esta temporada grandes actuaciones como local con pobres presentaciones como visitantes.

A sus problemas a domicilio suman que el Nou Congost es una cancha con similares características al Fernando Martín en cuanto al empuje de su público.

"Hemos explicado a los jugadores la similitud con nuestro pabellón, porque también es pequeño pero igualmente muy caliente y con la gente muy cerca", agregó el técnico, que se enfrenta al que fuera su compañero en Baskonia la temporada pasada en el banquillo, Ibon Navarro, del que fue asistente.

La mayor amenaza del Manresa reside en el juego interior del pívot serbio Dejan Musli, con pasado fuenlabreño ya que jugó de naranja brevemente en 2011. Los postes del Montakit, los balcánicos Josip Sobin y Oliver Stevic, y el canterano Chema González, tendrán que sujetar al jugador sobre el que gira todo el juego del ICL.

El capítulo de lesionados está solventado en el caso del equipo madrileño, que ya recuperó al ala-pívot estadounidense Ernest Scott para la Copa.

Así fue el partido de la primera vuelta