El Unicaja, con 23 puntos del ala-pívot francés Killian Tillie, ganó por 95-78 al Coviran Granada en el pabellón Martín Carpena tras una remontada en un último cuarto extraordinario (26-7 de parcial), que enterró las ilusiones de un cuadro granadino muy digno y que, a pesar de las bajas, completó tres buenos primeros cuartos en un duelo andaluz que fue un festín desde el triple.
Ésta fue la principal vía de los malagueños para sellar su decimoséptima victoria en la Liga Endesa, cimentada sobre todo en un gran último periodo. Y eso que el Coviran Granada salió con acierto y una mejor toma de decisiones, con mucha más regularidad que el Unicaja durante los primeros 29 minutos.
Así, los granadinos lograron un parcial de 8-18, que fue un toque de atención serio para los de Ibon Navarro, demasiado benévolos en defensa, aunque respondieron con una serie de ataques para un 7-0 que lo apretó todo de nuevo.
El Coviran Granada sacó su orgullo y neutralizó el gran potencial del Unicaja a base de mucha garra y consistencia, con el uruguayo Agustín Ubal muy inspirado, lo que le permitió volver a separarse en el marcador antes de que el cajista Killian Tillie cerrara el primer cuarto con un triple (21-17).
Otros dos tiros exteriores, uno de Tillie y otro de Dylan Osetkowski, igualaron el partido nada más reanudarse el segundo cuarto. Había mejorado Unicaja sus prestaciones, pero no bajó la guardia su rival, que aceptó el reto del cuerpo a cuerpo.
Se llegó al descanso con ventaja del cuadro granadino (43-48) y un baloncesto de mucha brega y precipitación, de ida y vuelta, y con un Coviran Granada que conservó el dominio del marcador, pero con los malagueños siempre a rebufo, a cinco puntos de distancia a falta de la segunda parte completa.
Al ritmo del eléctrico Kendrick Perry, el Unicaja trató de encontrar su punto de inflexión, pero siguió guerreando el equipo del técnico Pablo Pin, que, con cinco puntos en dos zarpazos de Ousmane Ndiaye y un triple de Pere Tomàs, se colocó 52-64, su máxima ventaja hasta el momento.
El Martín Carpena pasó de la tranquilidad al bullicio minutos después de que el Unicaja entrara en fase de remontada y llevara el duelo a otra dimensión. Se acercaron hasta los cinco puntos, y aunque el acierto exterior de Coviran Granada en el tercer cuarto estaba siendo sensacional -cinco de nueve-, dos triples de los malagueños lo comprimieron todo de nuevo (69-71).
La remontada se consumó en el último asalto, como muchas veces ocurre con este Unicaja, al que nunca debe darse por muerto y que fuerza a base de físico y presión a todos sus rivales a la excelencia durante 40 minutos. En los últimos instantes ya fue un rodillo para su vecino, un Coviran Granada que lamentó ademas la lesión de Ubal.
Con este triunfo, donde anotaron 16 de 38 tiros de tres, el plan de Ibon Navarro en liga sigue su curso y suma diecisiete victorias en 22 partidos, mientras que los guerreros de Pablo Pin se quedan con un balance de 6-16 en la zona baja.
95 - Unicaja (21+22+26+26): Perry (16), Kalinoski (3), Ejim (0), Kravish (4) -quinteto inicial- Tillie (23), Díaz (4), Balcerowski (2), Barreiro (6), Taylor (7), Carter (8), Djedovic (6), Osetkowski (16).
78 - Coviran Granada (27+21+23+7): Rouselle (11), Bamforth (16), Noua (22), Tomàs (3), Guerrero (5) -quinteto inicial- Ubal (12), Arrecoechea (1), Medal (0), Ndiaye (8).
Árbitros: Carlos Cortés, Carlos Sánchez Sixto y Guillermo Ríos.
Incidencias: Partido correspondiente a la Jornada 22 de la Liga Endesa disputado en el Pabellón José María Martín Carpena ante 9.691 espectadores.