Marvin Jones guió este domingo en Miribilla al Surne Bilbao Basket a un triunfo vital en la lucha por la permanencia sobre el Hiopos Lleida, al que los 'hombres de negro' se impusieron por 91-75 apoyados en la aparición estelar del pívot estadounidense al inicio del último cuarto.
Fue cuando el Hiopos Lleida había recortado la diferencia local de 16 a 7 puntos, del 68-52 al 68-61, y le aparecieron al público del Bilbao Arena los fantasmas de no pocas derrotas anteriores en un mismo escenario, cuando Jones tiró de los suyos con 8 puntos casi seguidos en un 11-3 que ya no tuvo respuesta de los visitantes.
El Surne Bilbao incluso llegó a remontar la diferencia de puntos con el conjunto de Gerard Encuentra respecto al partido de la primera vuelta, un 84-66 al que los locales le dieron la vuelta con el 91-72 que puso Tryggvi Hlinason a 51 segundos de final.
Pero no llegó a tanto la felicidad del equipo vasco, que se quedó en 16 puntos arriba con Jones (22 puntos, 5 rebotes y 25 de valoración) de estrella y Melwin Pantzar (11, 6 asistencias, 5 robos y 20) de principal escudero.
Mejor en lo estadístico, y también en el juego a pesar de la derrota de su equipo, estuvo el ala-pívot croata Luka Bozic (23, 5 y 29), que no dejó de dar pasos adelante cuando sus compañeros lo demandaban.
Con esta victoria, el Surne Bilbao Basket logra un triunfo de ventaja sobre unos puestos de descenso a los que no cae el Hiopos Lleida por mejor diferencia de puntos con sus rivales con 6 victorias, las que marcan la permanencia.
De inicio la baja de última hora de Edo Muric permitió jugar con los visitantes al recuperado Kenny Hasbrouck, mientras que Amar Sylla era baja en los locales.
El choque comenzó trepidante y con un 8-0 que avisó de las intenciones vizcaínas, que se adelantaron 10-2 lanados por Abdur-Rahkman y De Ridder. Pero el duelo iba de parciales y Paulí y Bozic cogieron el testigo para empatar rápido (12-12).
Incluso se puso por delante el Hiopos Lleida (16-17) con Bozic martilleando el aro bilbaíno, pero la aparición de Pantzar, con 5 robos en esos primeros diez minutos, y un parcial de 8-0, con Frey de estilete, dieron clara ventaja a los de negro al final del primer cuarto (28-20).
De nuevo enjugó pronto la desventaja el conjunto visitante, que volvió a remontar el marcador con un 0-9 liderado por Oriola y Madsen (30-31).
Pero un tiempo muerto de Jaume Ponsarnau y dos triples seguidos de Dragic y Pantzar devolvieron la iniciativa al Surne Bilbao para irse a vestuarios con una ventaja interesante de 7 puntos (48-41).
Con el regreso del juego a la cancha un 11-3 en cuatro minutos estiró la diferencia de los locales hasta 15 puntos que empezaba a parecer una ventaja ya muy relevante (59-44).
Parecía confirmarse esa ruptura definitiva en el marcador cuando los de negro se pusieron 16 arriba a 1.23 del final del tercer cuarto (68-52), pero otra aparición de Bozic dio vida a los burdeos -hoy de blanco de cara al último tramo (68-58).
Y siguió recortando el Hiopos Lleida al inicio del último cuarto para amenazar el triunfo local que parecía claro, con un triple de Walden (68-61), pero entre Jones y Domínguez devolvieron las aguas a su cauce anterior (75-61) a 8 minutos del final.
Ya hasta el final, el Surne Bilbao Basket llegó a soñar con incluso remontar el average a su rival, 18 puntos que volteó a 51 segundos del final (91-72) pero sin ser capaz de aguantar hasta el final de un partido que, no obstante, les supone un triunfo vital a los de Jaume Ponsarnau.
91 - Surne Bilbao Basket (28+20+20+23): Frey (11), Abdur-Rahkman (5), Zoran Dragic (11), De Ridder (14) y Hlinason (9) -cinco inicial-; Pantzar (11), Domínguez (5), Gielo (3), Jones (22), Silverio y Rabaseda.
75 - Hiopos Lleida (20+21+17+17): Villar (4), Bropleh (9), Paulí (10), Madsen (6) y Oriola (8) –cinco inicial-; Van der Vuurst, Walden (6), Hasbrouck (7), Bozic (23), Goodwin (2), Hamilton.
Árbitros: Rafael Serrano, Arnau Padrós e Iyán González. Eliminado por faltas De Ridder (m.39).
Incidencias: Partido de la Jornada 19 de la Liga Endesa disputado en Miribilla ante 8.284 espectadores. Dato oficial. Los jugadores portaron brazaletes de color verde 'esperanza' dentro de una iniciativa para apoyar la lucha contra el cáncer.