El Bàsquet Girona rompió este sábado una mala racha de cinco derrotas, con un claro y trabajado triunfo por 81-67 ante el Surne Bilbao Basket que significa media permanencia en la Liga Endesa: afrontará las últimas tres jornadas con al menos dos victorias sobre el descenso, que serían tres si el Monbus Obradoiro pierde este domingo en casa del Real Madrid.
Fotis Katsikaris había dicho que el partido era "una verdadera final" para el Bàsquet Girona, en una situación de "urgencia", y el equipo respondió con una gran actuación para lograr su undécimo triunfo en 31 duelos. Bajo la batuta de Iroegbu, omnipresente un día más: 21 puntos y 22 de valoración.
El equipo de Jaume Ponsarnau, ya salvado y sin Keith Hornsby ni Adam Smith, se despidió de las opciones de disputar el Playoff, mínimas, y sufrió la tercera derrota seguida, con cinco jugadores con al menos diez puntos: Kullamae (14), Renfroe (13), Reyes (12) y Pantzar y Hlinason (10).
El Bàsquet Girona inauguró el encuentro con un 'alley oop' de Marcos para Pons y el primer triple de York (0-5), protagonista en la derrota del domingo en Badalona con 26 puntos. El Surne Bilbao Basket falló los primeros tiros desde más allá de la línea de 6,75 metros, pero sumó cuatro rebotes ofensivos en los primeros cuatro minutos y volteó el marcador con un 0-6.
Ambos equipos apenas consiguieron seis canastas en el primer cuarto, marcado por la baja anotación. Terminó con un punto de margen para los visitantes (14-15).
En el segundo período las diferencias en el acierto en los triples comenzó a marcar diferencias: el Bàsquet Girona transformó cuatro de los primeros 12 que lanzó (33%) y cuadro vasco, uno (8%). Seis puntos consecutivos de Fjellerup dieron una ventaja de seis puntos al equipo local (25-19), espoleado por una afición que pronto se enfadó con los árbitros.
Los visitantes buscaron reaccionar, pero toparon con la calidad de Iroegbu, ya recuperado de la lesión que sufrió ante el Joventut y que encendió las alarmas en Fontajau. Encadenó nueve puntos justo antes del descanso para despedir la primera mitad con nueve puntos de margen para el Bàsquet Girona (36-27). El parcial del segundo cuarto fue de 22-12.
El Surne Bilbao Basket estrenó la segunda mitad con un 0-5 y su tercer triple en 14 intentos (36-32), pero el Bàsquet Girona, más inspirado en los tiros de tres puntos que en los de dos, respondió con el sexto en 17 (39-32). Iroegbu se convirtió en el primer jugador de la noche en llegar a diez puntos (43-36) y Goloman, también recuperado, enlazó seis puntos (49-40).
Y la ventaja local alcanzó los dos dígitos con un triple de York (52-40, 30-15 en puntos del banquillo), mientras se iban multiplicando las pérdidas vascas: cinco a 15 en los primeros 30 minutos. Hlinason y Renfroe no querían rendirse, pero Susinskas cerró el tercer cuarto con un triple sobre la bocina para situar el 59-48 en el marcador de Fontajau.
La renta del Bàsquet Girona creció hasta los 17 puntos (67-50), de la mano de Iroegbu. El Surne Bilbao Basket no dejó de intentarlo, pero la ventaja ya se mantuvo siempre por encima de los diez puntos y un triple de York dejó el partido bien encarrilado a falta de cuatro minutos (73-58). Fontajau acabó cantando 'l'any que ve, Girona a l'ACB' ('El año que viene, Girona en la ACB').
81 - Bàsquet Girona (14+22+23+22): Marcos (4), York (13), Martínez (3), Pons (7), Birch (8) -cinco inicial-; Susinskas (8), Iroegbu (21), Fjellerup (9), Colom (2), Goloman (6) y Sorolla (-).
68 - Surne Bilbao Basket (15+12+21+20): Pantzar (10), Kullamae (14), Reyes (12), De Ridder (3), Killeya-Jones (6) -cinco inicial-; Renfroe (13), Rabaseda (-), Hlinason (10), Rigo (-), Andersson (-) y Tsalmpouris (-).
Árbitros: Perea, Sánchez Mohedas y Lucas. Sin eliminados.
Incidencias: Partido de la trigésimo primera jornada de la Liga Endesa disputado ante 4.831 aficionados en el Pabellón de Fontajau, en Girona.