El Girona se impuso al Casademont Zaragoza a domicilio tras dos prórrogas (88-95) y certificó la permanencia en la ACB, lo que supondrá que el último encuentro de liga que disputará en su pista contra el Cazoo Baskonia será una fiesta.
El conjunto de Aíto García Reneses rompió la racha de tres derrotas consecutivas que acumulaba en el mejor momento posible porque el triunfo le salva del descenso de forma matemática sin tener que estar pendiente de otros resultados.
El equipo catalán sufrió para llevarse la victoria de la capital aragonesa en un partido en el que pudo más su necesidad que las ganas del Casademont Zaragoza por despedirse de su afición con un triunfo.
El cuadro aragonés comenzó el encuentro con más acierto que su rival, se despegó pronto en el marcador y llegó a tener hasta 8 puntos de diferencia en varias ocasiones, aunque conforme fueron transcurriendo los minutos la defensa visitante funcionó mejor.
El Casademont tuvo más problemas para anotar, hasta el punto de que en los últimos cuatro minutos y medio solo logró dos puntos, lo que permitió al Girona ajustar el marcador al término del primer cuarto (17-15).
El equipo de Aíto aprovechó que el Casademont Zaragoza continuaba despistado al inicio del segundo parcial y muy desacertado en los triples (llegó al descanso con uno anotado de 15 intentos) para darle la vuelta al marcador y llegar a tener hasta cuatro puntos de renta (27-31, m.16), aunque al llegar al descanso los hombres de Porfirio Fisac estaban por delante (35-33).
El Girona volvió a colocarse con ventaja, el Casademont respondió y se puso otra vez por delante. Hubo un duelo de triples ente ambos equipos que acabó con los visitantes entrando en los diez últimos minutos dos puntos arriba (55-57).
Dos triples de John Jenkins y una canasta de dos de Máximo Fjellerup en minuto y medio al inicio del último cuarto lanzaron al Girona hasta su máxima ventaja del partido (55-65), pero los locales reaccionaron con un 8-0 en dos minutos y medio con Howard Sant-Roos como estilete que volvió a apretar el marcador (68-67).
En un tramo final muy intenso, el Girona volvió a tomar ventaja, pero un triple de Stefan Jovic a falta de 27 segundos mandó el partido a la prórroga, ya que el equipo catalán falló su última posesión.
En la prórroga volvió a haber alternancia en el marcador y el equipo maño logró empatar a falta de tres décimas con dos tiros libres anotados por Tryggvi Hlinason.
El buen inicio de la segunda prórroga por parte del equipo de Aito fue decisivo, ya que se colocó seis puntos arriba (85-91) en dos minutos y el Casademont Zaragoza no pudo responder.
88 - Casademont Zaragoza (17+18+20+21+8+4): Jovic (13), Sant-Roos (21), Yusta (11), Simanic (4), Hlinason (7) -cinco inicial- Wright (4), Langarita (2), Jessup (12), Radoncic (2) Mekowulu (10) y Cruz (2).
95 - Girona (15+18+24+19+8+11): Colom (13), Garino (-), Jenkins (20), Prkacin (4), Sorolla (11) -cinco inicial- Fjellerup (5), Vila (7), Taylor (13), Miletic (2), Hill (9) y Marc Gasol (11).
Arbitros: Miguel Angel Pérez Pérez, Joaquín García y Carlos Merino. Excluyeron por personales a Marc Gasol (m.40) y Yusta (m.47).
Incidencias: partido correspondiente a la penúltima jornada disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante 7.499 espectadores.