El nuevo Hereda San Pablo Burgos de Salva Maldonado revivió en la Liga Endesa superando a domicilio a un camaleónico y errático Gran Canaria con una exhibición de Kravic (23 puntos y 9 rebotes) que permitió frenar el caudal ofensivo amarillo en los compases finales del encuentro.
Pese a empezar con buen pie el encuentro (5-0 de inicio), el equipo claretiano se fue atascando en sus errores ofensivos, mientras el conjunto castellano fue poco a poco carburando en la pintura, aprovechando la versatilidad de Kravic bajo aro endosando un parcial de 2-13 (7-13).
Los pupilos de Salva Maldonado siguieron estirando la diferencia a pesar de las rotaciones locales, con triples de Marc García y Benite (11-23). Los isleños, con Khalifa Diop poniendo músculo en la zona, trataban de capear el temporal, pero ni con los lanzamientos del otro Diop -Ilimane- y los tiros libres de Miquel Salvó consiguieron frenar la derrama provocada desde el perímetro (18-26).
El segundo cuarto arrancó por los mismos derroteros, con canastas de McGee y Díez elevando de nuevo la distancia a 12 puntos (19-31). Sin embargo, en una brutal reacción de los grancanarios, con despertar incluido de AJ Slaughter y con Kramer de director de orquesta, el encuentro volvió a apretarse en apenas dos minutos (parcial de 11-0 para un ajustado 30-31), propiciando el primer tiempo muerto de Maldonado.
La parada técnica permitió a los visitantes tomar oxígeno, con mate de Kravic y un repunte anotador de Salash (32-38), pero los hombres de Porfirio FIsac volvieron a la carga, mejorando sus prestaciones jugadores que no habían tenido protagonismo hasta el momento como Artem Pustovyi, cerrando la primera parte el ucraniano con un alley-oop para cambiar las tornas en el electrónico (39-38).
En la reanudación, los dos equipos engancharon un sinfín de errores en ambos aros. Después de un mate fallido de Pustvoyi y otro de Rabaseda, añadido todo ello a numerosas pérdidas en las dos trincheras, el marcador siguió más que apretado (46-45). El Burgos se aferraba a Gamble y el ‘Granca’ seguía delegando en los centímetros de Artem.
El juego del Hereda San Pablo siguió mejorando en la pintura, pero al mismo tiempo mejoraba el perímetro de los amarillos, ampliándose poco a poco la ventaja isleña (65-57), animándose al recital el argentino Nico Brussino, recientemente en cuarentena por la covid-19 junto con Stevic.
Una falta antideportiva de Kramer volvía a revivir al Burgos, endosando un parcial de 3-12 a costa de esa penalización (73-74). Kravic se multiplicaba en ataque y Ennis volvía a asumir los galones en la batería exterior insular, volviendo las tablas en el Gran Canaria Arena (80-80) a cuatro minutos para la conclusión.
A partir de ahí, los locales sufrieron un serio cortocircuito en ataque, acumulando casi cinco minutos sin ver aro, circunstancia que aprovechó el equipo castellanoleonés para sumar una más que valiosa victoria (82-89).
82. CB Gran Canaria (18+21+28+15): AJ Slaughter (12), Brussino (8), Pustovyi (10), Shurna (7) y D. Ennis (16) -equipo inicial-; Kramer (14), I. Diop (5), Salvó (2), K. Diop (8) y J. López (-).
89. Hereda San Pablo Burgos (26+12+22+29): Kravic (23), Salash (12), Rabaseda (2), McGee (5) y Renfroe (8) –equipo inicial- Benite (13), Nikolic (3), Díez (4), M. García (12) y Gamble (7).
Árbitros: Emilio Pérez Pizarro, Raúl Zamorano y Rubén Sánchez Mohedas. Sin eliminados.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la décimo segunda jornada de la Liga Endesa disputado en el Gran Canaria Arena ante 4.426 espectadores.