Valladolid, 30 Oct. 2011 (Inés Morencia, EFE).- El Blancos de Rueda Valladolid volvió a caer, lastrado por un pésimo tercer cuarto, en el que sólo fueron capaces de anotar once puntos ante la férrea defensa del Caja Laboral que, sin realizar un gran partido, no encontró demasiados obstáculos en la segunda mitad para llevarse la victoria del Pisuerga.
Los vallisoletanos tardaron en organizarse defensivamente lo que, unido a los fallos en ataque, permitió a su rival establecer un primer parcial de 0-6 prácticamente sin despeinarse, aunque supieron reconducir la situación de inmediato, merced a una mejoría de cara al aro (5-6), que no defensiva.
Los baskonistas, sin un juego brillante, apenas tuvieron problemas para mantener el dominio en el marcador, con un Oleson difícil de frenar que ejerció de cicerone para su equipo, mientras que los vallisoletanos tenían serias dificultades para superar el juego interior del cuadro visitante, que finalizó el primer cuarto con ventaja (13-19).
El Blancos de Rueda intentó apretar en su zona, para cimentar una remontada ante un Caja Laboral que con escaso juego conseguía su propósito de seguir controlando el partido (15-25, min.12), si bien los vallisoletanos fueron creciéndose poco a poco.
Así, con una más que evidente mejoría defensiva, el cuadro local, basándose en el esfuerzo colectivo, comenzó a tutear al Caja Laboral, que iba cargándose de personales, hasta llegar a situarse 28-29, lo que desesperó a Dusko Ivanovic quien, a pesar del tiempo muerto solicitado, no pudo impedir que los vallisoletanos dieran la vuelta al resultado (34-33).
Las últimas canastas de Nemanja Bjelica y de Heurtel, dejaron el encuentro en tablas antes del descanso (36-36), donde sin duda el exigente técnico del conjunto vasco pidió más intensidad en defensa y cordura en el juego ofensivo a sus jugadores.
Tras la reanudación, y con San Emeterio como referente del cuadro baskonista, el mando del partido regresó a las manos del Caja Laboral, que supo aprovechar los errores locales para adquirir una renta de seis puntos (41-47, min.26), que obligó a Luis Casimiro a solicitar un tiempo muerto.
Pero el Caja Laboral no estaba dispuesto a ceder más y las diferencias siguieron aumentando (45-53), gracias su mayor presión defensiva y, por contra, a la menor intensidad aplicada por los locales, que derivó en sólo once puntos en el tercer cuarto y una renta de nueve puntos para los de Ivanovic (47-56).
Poco había ya que hacer ante un crecido Caja Laboral, donde reclamó su protagonismo Teletovic, y un empequeñecido Blancos de Rueda, que perdonó demasiado defensivamente lo que aprovecharon los vascos para aumentar aún más la ventaja (47-61), que les permitiría disputar con tranquilidad el tramo final del encuentro, sin opción a las sorpresas.
64 - Blancos de Rueda Valladolid (13+23+11+17): Dumas (-), Umeh (2), Robinson (14), Touré (6), Seawright (12) -cinco inicial-, Nacho Martín (6), Diego García (9), Uriz (7), Isaac López (4), Bagaric (2) y Zamora (2).
76 - Caja Laboral (19+17+20+20): Heurtel (10), Nemanja Bjelica (5), Oleson (7), Teletovic (17), Seraphin (12) -cinco inicial-, Milko Bjelica (4), Dorsey (-), Prigioni (2), San Emeterio (17), Williams (2) y Ribas (-).
Árbitros: Mitjana, Perea y Pérez Niz. Eliminaron por cinco faltas personales a Seawright (min.39), del Blancos de Rueda.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la quinta jornada de Liga Endesa, disputado en el pabellón Pisuerga ante 5.000 espectadores.