Zaragoza/San Sebastián, 28 Mar. 2009 (EFE).- El CAI Zaragoza tiene marcado en rojo en su calendario el partido de este domingo contra el Bruesa como una victoria imprescindible frente a un rival directo en la lucha por la permanencia.
El conjunto aragonés es consciente de la importancia de este enfrentamiento porque un triunfo supondría dar un paso muy importante pues aventajaría en una victoria al conjunto donostiarra en la clasificación y podría alejarse de la zona de descenso, teniendo en cuenta que el C.B. Murcia recibe en esta jornada la visita del líder Tau Cerámica y que el ViveMenorca, colista, descansa.
El conjunto aragonés atraviesa uno de los mejores momentos de la temporada en cuanto a resultados se refiere ya que ha sumado tres triunfos en las cuatro últimas jornadas, de los que dos han sido lejos del Pabellón Príncipe Felipe, lo que supone prácticamente la tercera parte de las victorias logradas en toda la temporada.
Esto, que evidentemente es un aspecto tremendamente positivo, preocupa en cierta manera al técnico Alberto Angulo porque se podría dar un exceso de euforia que siempre suele ser peligroso en el deporte.
Controlar estas sensaciones es un aspecto que ha intentado lograr el preparador del conjunto rojillo para evitar que el rendimiento mengüe, porque si con la victoria el paso que daría su equipo es muy importante, la derrota le mantendría pegado a la zona peligrosa de la clasificación.
En la reacción del CAI Zaragoza en estas últimas jornadas ha tenido mucho que ver la llegada del último fichaje, el pívot estadounidense Loren Woods, que ha fortalecido el juego interior en ataque y defensa por su capacidad anotadora, en el primer caso, y por su intimidación en el segundo, circunstancias ambas que, a la vez, han hecho crecer deportiva y anímicamente al resto de jugadores.
Para este encuentro el preparador del conjunto aragonés contará con toda la plantilla a su disposición una vez que los dos jugadores que han tenido problemas físicos esta semana, los argentinos Matías Lescano y Lucas Victoriano, se ha recuperado de sus dolencias.
El primero de ellos dio el susto el pasado jueves al sufrir un leve pinchazo en un aductor, mientras que Victoriano ha mejorado de su tobillo en el que tenía molestias tras haber pisado a su compañero Quino Colom en un entrenamiento.
Por su parte, los guipuzcoanos se juegan buena parte de la temporada al enfrentarse a un rival directo en la lucha por la permanencia, más aún cuando se encuentra tan cerca de los puestos de descenso.
Y es que los donostiarras sienten ya en el cogote el descenso después de caer derrotados la semana pasada frente al Kalise Gran Canaria en casa, lo que les ha situado sólo una victoria por encima del CB Murcia y ahora mismo empatados con los maños.
Será un choque tenso entre dos rivales directos porque el final de la campaña regular está cada vez más cerca y el margen de maniobra cada vez es menor ante posibles errores.
Para ello, Pablo Laso ha podido trabajar a lo largo de toda la semana con todos los hombres de su plantilla a los que habrá debido mentalizar para que se vacíen al máximo porque un traspié en Zaragoza podría hundirles psicológicamente.
Pablo Laso ya ha advertido días atrás de que "a medida que se acercan al final, los partidos tienen mayor valor, sobre todo, para los equipos con un corto margen de victorias".
Según Laso, el CAI Zaragoza "es un rival directo" en la lucha por la permanencia, ya que está "empatado con el Bruesa en la clasificación. Si sacamos adelante este encuentro, nos aportará un colchón importante respecto a la situación de descenso, de lo que somos todos muy conscientes", concluyó