Murcia, 27 ene. 2008 (EFE).- El Unicaja, liderado por Jiri Welsch, venció en un final de partido muy apretado a un Polaris World Club Baloncesto Murcia que se mostró muy combativo y que tuvo la opción de ganar con un tiro de Jimmie Hunter a falta de dos segundos para el final.
El equipo dirigido por el italiano Sergio Scariolo ganó en el Palacio de los Deportes de Murcia merced a su fortaleza defensiva, al dominio del rebote (34 rechaces por 26 de su rival) y al buen hacer en el apartado ofensivo del checo Welsch, quien se fue hasta los 24 puntos y con sólo tres tiros de campo fallados.
El encuentro, no obstante, comenzó siendo claramente dominado por el Polaris World CB Murcia, que, con un parcial de 8-0 nada más arrancar, impuso el ritmo durante un primer cuarto en el que destacaron el estadounidense Hunter y el francés, ex del Unicaja, Stephane Risacher, quienes anotaron 7 puntos cada uno en este periodo.
El equipo entrenador por el canario Manolo Hussein concluyó el cuarto con una ventaja de 4 puntos (21-17) que no fue mayor precisamente porque Welsch ya hacía daño (11 puntos suyos en los diez minutos iniciales).
El segundo cuarto fue de clara superioridad malagueña. El Unicaja, fijando sus marcajes y corriendo tras rebotear en defensa, encadenó un parcial de 0-11 que le puso con un 23-28 en el ecuador de este periodo, ventaja que se amplió hasta los 9 puntos (31-40) poco antes del descanso. Tres triples del croata Davor Kus dispararon a su equipo.
Después del intermedio, los de Scariolo mantuvieron el tono y el intercambio de canastas les favoreció para mantener un \'colchón\' importante a falta de los diez minutos definitivos (52-61). En el tercer cuarto se fue la luz, justo cuando Risacher tiraba tiros libres, pero el parón de un cuarto de hora obligado por esta incidencia no tuvo el temido efecto de un cambio de decoración para los visitantes que muchas veces se produce.
De vuelta a la competencia, los árbitros adquirieron un triste protagonismo, sobre todo en una jugada en la que tras pitar uno de ellos, la jugada siguió y acabó con triple de Carlos Cabezas (60-68). Los colegiados, pese a que su pitido había hecho pararse a los locales, acabaron dando validez a una canasta que a la postre pudo resultar decisiva.
El Unicaja, con Cabezas eligiendo bien las mejores opciones para los suyos, se mantuvo firme y parecía tener sentenciado el choque a falta de dos minutos para la conclusión (63-70). Sin embargo, el Polaris World CB Murcia no había dicho su última palabra y, apoyado por su fervorosa afición, llegó a empatar a 70 después de 5 puntos seguidos de Hunter. Quedaban 21 segundos y Hussein decidió que sus jugadores hicieran falta. Fue sobre Welsch, quien falló el primer tiro libre pero anotó el segundo para poner de nuevo con ventaja al cuadro andaluz (70-71, a 13 segundos del final).
En el siguiente ataque Hunter fue directo a por la canasta y su tiro con el reloj ya \'agonizando\' no entró, por lo que ahí se esfumaron las opciones de triunfo para los de casa. Melvin Sanders, objeto de una falta a la desesperada, puso el 70-73 que ya fue definitivo pues, a falta de 4 décimos para el final, el tiro de Pedro Robles desde el centro del campo pasó lejos del aro malagueño.
Así concluyó un encuentro en el que el ala pívot estadounidense Lou Roe, sustituto de su compatriota Jared Reiner, debutó con el Polaris World CB Murcia y lo hizo con buena nota -12 puntos y 7 rebotes en casi 24 minutos-.
70 - Polaris World Club Baloncesto Murcia (21+12+19+18): Thomas (12), Hunter (21), Risacher (15), Kammerichs (2) y Triguero (6) -cinco inicial-, Gavel (0), Robles (0), Fajardo (0), Roe (12) y Opacak (2).
73 - Unicaja (17+23+21+12): Cabezas (5), Welsch (24), Carlos Jiménez (5), Haislip (12) y Daniel Santiago (2) -cinco inicial-, Popovic (4), Kus (9), Ndong (4), Germán Gabriel (4) y Sanders (4).
Árbitros: Xavier Amorós, Juan Luis Redondo y David Soto. No hubo eliminados por faltas personales.
Incidencias: Partido correspondiente a la décimo novena jornada de la Liga ACB que se disputó en el Palacio de los Deportes de Murcia ante unos 5.900 espectadores. Poco antes de que concluyera el tercer cuarto se produjo un apagón de luz que obligó a detener el partido durante quince minutos.