Valencia, 29 dic. 2007 (EFE).- El Pamesa Valencia recibe mañana en el pabellón de la Fuente de San Luis al Cajasol en un encuentro en el que la victoria puede dejar atada su participación en la próxima edición de la Copa del Rey.
El equipo que dirige Fotis Katsikaris acumula nueve triunfos, uno menos de los que históricamente, salvo alguna excepción, se han necesitado para asistir a un torneo copero en el que después de ocho presencias consecutivas no estuvo el equipo valenciano en la pasada campaña.
El mejor aval del Pamesa Valencia para derrotar mañana al equipo sevillano es la fortaleza que ha mostrado hasta el momento en el pabellón de la Fuente de San Luis, donde ha ganado todos los encuentros que ha disputado esta campaña tanto en la Liga ACB como en la Copa ULEB.
Su última victoria la logró el pasado jueves ante el Polaris World CB Murcia en un encuentro en el que tuvo que mostrar un fuerte carácter defensivo para llevarse un triunfo y en el que destacaron especialmente Shammond Williams, Albert Oliver y Víctor Claver.
El Cajasol en cambio afronta este encuentro después de haber perdido el pasado viernes ante el Tau en su pista, en la que fue su décima derrota de la campaña, un balance que le mantiene en la zona baja de la clasificación con sólo una victoria más que el último clasificado.
Además, si el Pamesa Valencia no sabe lo que es perder en casa, el equipo que dirige el argentino Rubén Magnano no conoce la victoria lejos de su pista, ya que sus cuatro triunfos los ha conseguido como local.
El equipo valenciano ha despedido los últimos seis años con un triunfo y ha ganado en once de las diecinueve visitas ligueras del conjunto sevillano a la Fonteta, aunque el Cajasol rompió la pasada campaña una racha de seis derrotas seguidas.
El Cajasol viaja a Valencia donde se enfrentará al Pamesa con el claro objetivo de sumar un triunfo que le permita poner bálsamo a su situación en una cancha donde el año pasado logró la victoria.
Los cajistas tendrán en la mente el triunfo del pasado año en la difícil plaza valenciana, donde lograron imponerse por 70-87 al cuadro ya entonces adiestrado por Fotis Katsikaris.
El balance global de enfrentamientos levantino-sevillano, no obstante, favorece a los locales, que han logrado imponerse a los cajistas en 11 de las 19 ocasiones en que ambos equipos se han enfrentado en el pabellón de la Fuente de San Luis.
Pero por encima de precedentes, los hombres de Rubén Magnano buscarán una victoria que les permita resarcirse de la derrota sufrida el viernes en casa ante el Tau Cerámica y añadir así un importante triunfo a su cómputo liguero, que hoy le mantiene en decimoquinta posición con cuatro victorias y diez derrotas.
Los valencianos, por su parte, sextos con un balance de nueve-cinco, tratarán de hacer valer su condición de locales para dejar prácticamente sentenciada su clasificación copera.
El Cajasol tratará de invertir la tendencia seguida hasta hoy y acabar con la imbatibilidad valenciana de los de Katsikaris en La Fonteta al tiempo que estrenar su casillero de victorias a domicilio.
La empresa, no obstante, se considera difícil ya que los valencianos han ganado los siete partidos disputados hasta ahora en su cancha.
El conjunto levantino, de hecho, ostenta la segunda mejor defensa de la competición con un promedio de 70,43 puntos encajados por encuentro, ocho menos que los recibidos por los cajistas (78,57), duodécimos en esta parcela.
En ataque, el Pamesa cae hasta la octava posición con 77 puntos anotados de media, sólo dos más que los conseguidos por el Cajasol, undécimo con 75,86.
El técnico Rubén Magnano podrá contar de nuevo por quinto partido consecutivo con todos sus efectivos para el duelo ante los valencianos.