Lagun Aro Bilbao y ViveMenoca buscarán un triunfo que aclare su futuro

Bilbao/Menorca, 21 dic. 2006 (EFE).- El Lagun Aro Bilbao Basket buscará mañana en La Casilla ante el ViveMenorca (20:00 horas) una victoria que le dé "tranquilidad" de cara a lo que queda de primera vuelta, tres partidos posteriores en los que al equipo bilbaíno se enfrentará a rivales tan complicados como Akasvayu Girona, TAU Cerámica y Pamesa Valencia.

"Todos somos conscientes de que este choque es muy importante para el término de la primera vuelta porque el Menorca viene necesitado de un triunfo y nosotros estamos en una situación en la que si ganamos podemos llegar con tranquilidad al final de la primera vuelta y si perdemos se complica mucho porque tenemos un calendario difícil", explicó esta tarde Txus Vidorreta.

"Una victoria ratificaría un buen inicio de temporada", resumió el entrenador del Lagun Aro Bilbao, en todo caso confiado en el poderío y en la "capacidad anotadora" de su equipo en casa y en el "ritmo defensivo" al que pueda someter al rival para luego poder jugar "con alegría en ataque".

El técnico bilbaíno destacó del conjunto isleño la "larga" plantilla con la que cuenta, si bien admitió las "muchas dificultades en el juego interior" que le han provocado las lesiones de Alfons Alzamora y Jordi Llorens.

Aún así, avisó que "el Menorca es un equipo con solidez y que está compitiendo en todos los encuentros hasta el último minuto".

En cuanto a los cambios que se hayan podido darse en el equipo balear con la llegada del nuevo técnico, Ricard Casas, para suplir al anterior, Curro Segura, el de Indautxu no espera "demasiadas sorpresas".

En ese sentido, explicó que con ambos técnicos, el ViveMenorca apuesta por "largas posesiones" en ataque.

Por otro lado, Vidorreta confía también en lo "animado" que suele acudir el público de La Casilla a los partidos y en la "ilusión" que tiene siempre la afición rojilla cuando va ver a su equipo.

En cuanto al estado físico de su plantilla, Iván Koljevic se encuentra prácticamente recuperado de la tendinitis en la rodilla izquierda que le impidió jugar el domingo pasado en el Palau Blaugrana.

Más complicado lo tendrá Milan Majstorovic, que aún no ha superado del todo la lesión de rodilla que le tiene mermado en las últimas semanas. No obstante, ninguno de los dos jugadores forma parte de la rotación principal del técnico bilbaíno.

Por su parte, el Vive Menorca se desplaza hoy a Bilbao para enfrentarse mañana al Lagun Aro Bilbao en partido correspondiente a la decimocuarta jornada de la liga ACB que se disputará en el Pabellón la Casilla de la ciudad vizcaína.

El entrenador del equipo menorquín Ricard Casas recupera para este importante partido ante un rival directo al pívot y capitán Jordi Llorens y al base-escolta italoargentino Daniel Farabello, que vuelven al equipo tras un mes lesionados.

El resto del conjunto insular estará también a disposición del técnico menresano excepto el pívot Alfons Alzamora, que se recupera de su lesión de rodilla.

El objetivo del ViveMenorca es ganar su primer partido lejos de su Pabellón Menorca después de lograr su tercera victoria de la presente campaña ante el Bruesa GBC el pasado sábado, al que derrotó por 21 puntos de diferencia (76-65).

Los menorquines quieren encadenar por primera vez en la temporada dos victorias consecutivas, lo que les permitiría remontar en la clasificación.

La evolución que está teniendo el grupo que prepara Casas desde que éste se hizo cargo del equipo se ha hecho patente en la intensidad competitiva del conjunto mahonés.

La evidente mejora defensiva unida a la gran disciplina de equipo hace que los seguidores isleños sean optimistas y estén expectantes ante el partido de mañana, porque la victoria en Bilbao puede ser de gran valor.

La expectación que ha despertado el partido del ViveMenorca ante el equipo bilbaíno que prepara Txus Vidorreta ha provocado una concentración de peñas del Menorca en el Pabellón insular para seguir las evoluciones de su equipo en una pantalla gigante.

Los precedentes en los enfrentamientos entre los dos equipos en la ACB son de una victoria para cada uno. En la temporada pasada, en Bilbao, los vizcaínos se impusieron por 86-61, y en, Mahón los insulares vencieron por 85-79.

Casas afirma en torno a su equipo: "Viajamos con nuestra máxima exigencia. Hemos trabajado bien y el partido frente al Bruesa ya es historia. Tenemos una máxima: partido ganado o partido perdido es partido pasado y ya no hay que pensarlo más".

Sobre el Lagun Aro Bilbao cree que "posee gran capacidad de resolución exterior y polivalencia interior que hacen de él un conjunto difícil de batir, además cuentan con una cancha complicada".

"Será un encuentro de dificultad máxima, en el que debemos acudir con nuestra mejor preparación y hacerlo muy bien para ganar -agregó-. Weis es un jugador muy importante para ellos, al que tenemos que controlar porque puede 'rebotear' mucho y hace daño por su intimidación. Además, debemos controlar sus rachas positivas porque son muy peligrosas".

Sobre su equipo, Casas opina que "aún ha de mejorar cosas, como buscar más formas de anotar en ataque estático, jugar más rápido. La definición de un buen equipo defensor no se mide sólo por un partido acertado sino que hay que buscar regularidad en este rendimiento para encadenar una larga temporada a un nivel similar y no relajarse".

"Tampoco me gustaría -continuó- que se identificara al equipo como controlador del juego, sino que puede y sabe correr".

El entrenador catalán del ViveMenorca concluye que una victoria sería un paso más para que el equipo sólo disponga de él mismo y, paralelamente, generaría un mayor respeto hacia el conjunto menorquín en la liga.