El acto de presentación de Jaka Lakovic tuvo lugar en la sala de prensa del Gran Canaria Arena, donde el entrenador esloveno estuvo acompañado por el presidente del Club Baloncesto Gran Canaria, Enrique Moreno, y el director deportivo Willy Villar.
Moreno dio la bienvenida al entrenador esloveno y deslizó que estaba entusiasmado de «presentar un proyecto deportivo ilusionante«. A continuación, tomó la palabra el director deportivo. Villar expuso su experiencia profesional con Lakovic, «le conozco desde que era jugador, compañeros de equipo me hablaban de su ética de trabajo, siempre se me quedó eso en la cabeza, además de la admiración que le tenía como jugador«. También destacó sus comienzos en los banquillos, «cuando comenzó como entrenador me llamó la atención, recuerdo su primer partido en ACB, también le seguí toda su trayectoria en Alemania. Siempre me ha transmitido que es un potencial tremendo, que puede volcar en la figura del entrenador lo que era como jugador.” Por último, comentó cómo transcurrió la negociación para ficharle como nuevo entrenador del Gran Canaria, «fui directamente a hablar con él a Alemania, tuvimos una entrevista y ahí terminó por dejarme bastante claro que estamos en el momento de ficharlo. Creo que va a ser un entrenador número 1, si tardábamos un poco más, seguramente le íbamos a perder.”
A posteriori fue el turno de Jaka Lakovic, quien inició su comparecencia hablando del «reto apasionante» que supone para él dirigir el banquillo de su nuevo Club. «Estoy muy agradecido por la oportunidad de ser el entrenador del Gran Canaria, un Club que compite al máximo nivel, en la mejor liga de Europa y también en EuroCup«.
El esloveno desglosó también que tiene una idea muy clara de baloncesto, «partiendo siempre de una defensa agresiva con buen rebote, siempre dándote opciones de jugar rápido. Luego en cinco contra cinco jugar en equipo. Eso significa mucho movimiento de balón y encontrar el mejor tiro«.
Lakovic aterriza con humildad, pero también «con mucha responsabilidad para hacer las cosas bien y construir el equipo lo mejor posible. Eso significa hacer buen trabajo en verano para que en invierno podamos dormir bien«.
Uno de los puntos fundamentales de su forma de trabajar es la idea de construir un equipo, «para mí es primordial hacer un equipo que será equipo. Un equipo con buena química, que seamos una familia. Luego vendrán tormentas y salir de una tormenta es siempre más fácil cuando el equipo está unido«.
Para finalizar, enumeró su vasto aprendizaje tanto de jugador como de entrenador ayudante, «he tenido la suerte de jugar en el nivel más alto de Europa y bajo entrenadores que están considerados como mejores entrenadores de Europa o del mundo. He aprendido mucho ya como jugador, luego en el día a día esta experiencia me puede ayudar a entender al jugador de la mejor manera posible. Después como entrenador he trabajado y he estudiado mucho, he sido entrenador ayudante, también con muy buenos entrenadores, de varios estilos de baloncesto. He trabajado con Igor Kokoskov, que tiene una mezcla de escuela balcánica muy mezclada con estilo NBA que me abrió mucho los ojos de mi aprendizaje como entrenador. He trabajado con Carles Durán, que todos sabemos que tiene una forma de jugar de la escuela de Aíto. He cogido cosas que me gustan y he formado mi filosofa propia de entrenar y al final creo que soy un trabajador nato. A veces muy pesado, muy exigente, pero siempre por el bien del equipo».