Manresa (Barcelona)/Valencia, 11 may. 2005 (EFE).- Acabar la temporada con una buena actuación es toda la presión que tendrá mañana el Ricoh Manresa en el partido ante Pamesa Valencia, donde los catalanes sólo piensa en despedirse de sus aficionados con un victoria..
En el encuentro ninguno de los dos conjuntos tiene ya nada por lo que luchar, ya que el Ricoh tiene asegurada la permanencia, mientras que los valencianos no tiene opciones de entrar en el Playoff.
El Ricoh ha conseguido 11 de sus 12 victorias esta temporada en el Nou Congost y mañana quiere agradecer a su afición el apoyo prestado en un año que no ha sido fácil para el equipo.
El base Albert Oliver reconoció que fuera de su pista han estado mal esta temporada. "Tenemos que ser conscientes de lo que hemos hecho este año y para el próximo deberemos ser más regulares y ganar más partidos fuera de casa", aseveró el jugador.
Josep Vives, presidente de la entidad, explicó hoy en rueda de prensa que "la base de la plantilla tiene contrato para la temporada 2005/06 y la intención es que todas las piezas claves del equipo continúen".
Sobre el técnico del equipo, Ricard Casas, que acaba contrato en junio, Vives adelantó que "ya se ha ofrecido la oferta de renovación a su representante, porque la voluntad del club es que continúe en el banquillo".
El Ricoh Manresa ha preparado una fiesta para celebrar la permanencia en la ACB y agradecer el apoyo a la afición, por lo que durante el partido de mañana ante el Pamesa el público encontrará en sus asientos las piezas para formar un gran mosaico que reproducirá la bandera catalana y los colores del club -el rojo y el blanco- y al final se brindará con cava.
El Pamesa Valencia, por su parte, sólo pondrá en juego su imagen ya que no tiene posibilidades matemáticas de alcanzar las eliminatorias por el título de la competición.
Además, el equipo valenciano sabe que gane o pierda los dos próximos encuentros acabará la temporada en la novena posición de la clasificación.
Con este planteamiento, el conjunto valenciano sólo puede aspirar a tratara de evitar empeorar su mala temporada, un objetivo que deberá estimularle para cerrar el curso sin los nuevos sobresaltos que provocaría una derrota abultada en alguna de estas últimas jornadas.
Existe, no obstante, un pequeño premio que el Pamesa puede conseguir en el pabellón del Nou Congost, que es romper una racha de ocho derrotas consecutivas en la pista del equipo manresano, en la que no gana desde la temporada 1991-92.
El conjunto que dirige Chechu Mulero afronta por tanto un extraño final de liga que puede llevar al técnico vallisoletano a dar minutos a los jugadores de la cantera (Alex Urtasun, Pedro Llompart y Oliver Arteaga) que apenas han gozado de oportunidades en los últimos encuentros.
Para este penúltimo encuentro, Mulero no podrá contar con el ala-pívot alemán Ademola Okulaja, que continúa con molestias en la rodilla izquierda, ni con el francés Cyril Julian, quien sufrió el pasado martes un esguince de grado 2 en el tobillo.
El técnico destacó que aunque no tienen opciones de clasificarse para las eliminatorias por el título de la ACB afrontan el encuentro de mañana en la pista del Ricoh Manresa con el objetivo de lograr la victoria.
"Desgraciadamente, lo afrontamos sin opciones pero no tiene que ser óbice para que planteemos el partido para salir a por el triunfo", apuntó Mulero, que recordó no obstante las dificultades que entraña el Manresa.
"En su casa son un equipo muy valiente y muy duro. La agresividad y la velocidad en el contraataque son sus armas fundamentales en casa y hay que ver cómo respondemos. No será una tarea sencilla porque no estamos para tirar cohetes, pero tenemos que afrontarlo con seriedad y con mucha profesionalidad", explicó.
Mulero señaló que no va a variar su planteamiento técnico para estos dos próximos encuentros. "Tenemos que plantear las cosas con la obligación como profesionales de salir ganar. No podemos dejar que haya ni la más mínima duda", apuntó el vallisoletano que, aún así, no quiso entrar en más especulaciones.
"Si después de 34 jornadas desciende algún equipo, será porque se lo ha merecido. Nadie nos podrá culpar de nada", comentó antes de asegurar que está tranquilo respecto a su futuro.
"Ahora estoy pensado en estos dos partidos y en el trabajo de post-temporada. En un deporte profesional todo el mundo tiene obligaciones y unos derechos en un contrato. Estoy tranquilo, firme para ser segundo entrenador y espero volver a serlo pero en este mundo dependes de quien tome las decisiones", señaló.