Lugo, 22 abril 2004 (Efe).- Empeño y concentración fueron las bazas que ambos equipos pusieron sobre el terreno de juego; armas que brillaron en los primeros minutos del encuentro y que, finalmente, resultaron más efectivas para el grupo lucense.
El juego interior de Garcés, apoyado a la perfección por Davis, fue clave para alcanzar el último minuto con una diferencia de 4 puntos (22-18) sobre el equipo catalán que, en un primer momento, se había adelantado en el marcador.
Y siguiendo esa tónica, el Leche Río mantuvo la compostura y se aferró a un perfecto cuadro defensivo que los catalanes no lograron superar, a pesar de la intensidad y el equilibrio del juego, por lo que llegaron al descanso con ventaja de 8 puntos (41-33).
Al comienzo de la segunda parte fueron de nuevo los lucenses los que con mucha velocidad en el juego superaron una y otra vez al equipo de Lleida que empezó a flojear con un Esteller, autor de 20 de los 33 puntos logrados por su equipo, que empezó a decaer.
El equipo lucense supo sacar provecho de la situación de la mano de Nacho Biota, que consiguió 8 puntos de los 9 de todo el partido.
Para los catalanes comenzó entonces un juego a la desesperada y llegaron al minuto 32 reduciendo la diferencia a dos puntos (65-63), después de un triple de Berni Alvarez.
En el Leche Río resucitó Jorge Racca que, paulatinamente, con la ayuda de Gomis fue ampliando diferencias en el marcador y llegaron al 39 con la máxima diferencia del partido a favor del equipo gallego (80-68), que sentenció el partido, hasta alcanzar el resultado final 85-71.
85. Leche Río (22+19+22+21): Lewis (6), Bravo (2), Racca (18), Davids (7), Garces (18) -cinco inicial-, Gomis (8), Sanmartín (7), Biota (9), González (7), Fernández, Núñez (2).
71. Caprabo Lleida (18+15+25+13): Comas (8), Esteller (29), Angulo (2), Rogers (7), Tamames (2) -cinco inicial-, Alvarez (11), Alston (10), Bramlet, Rodríguez (2) y Arco.
Arbitros: Hierrezuelo, Pérez Pérez, Pérez Niz. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la penúltima jornada de la fase regular de la Liga ACB disputado en el Pazo Provincial de los deportes ante unos 5000 espectadores.