Luis Guil ha contado, en declaraciones a Efe, que la concentración de la pasada semana al término de la cual España cerró su pase tras ganar a Rumanía, "ha sido una burbuja, con algunos jugadores de baja", pese a lo cual, el cuerpo técnico "consiguió formar un equipo de trece jugadores muy competitivos".
El técnico sevillano admitió que la derrota ante Israel del sábado "fue un palo, a pesar de haber jugado muy bien los dos primeros cuartos" frente a un combinado hebreo "invicto en estas ventanas" y que "supo reaccionar ante Rumanía" el lunes.
"Teníamos claro que era un partido clave para dejar sellada la clasificación antes de la última ventana. Salimos muy concentrados desde la defensa e hicimos, en ataque, buenos tiros. Creo que dimos un alto nivel pese a las bajas. La próxima ventana que será en febrero ya sin la presión de tener que conseguir la clasificación", concluyó Luis Guil.