El Real Madrid defendió su liderato con meridiana claridad ante un MoraBanc Andorra (91-60) al que no dio opciones en ningún momento. Tras un primer cuarto de dominio local (24-12) llegó un segundo aún más desnivelado (26-2) que dejó el marcador en +36 (50-14) antes del paso por los vestuarios.
El conjunto blanco iguala la cuarta máxima ventaja obtenida al descanso en un partido de Liga Endesa en la era por cuartos (desde 2000-01), estando el récord absoluto en +43 (Baskonia ante Lucentum en 2000). Además, el +36 representa la máxima del Real Madrid en el primer tiempo.
Por otro lado, los 14 puntos encajados en los primeros veinte minutos representan la mejor defensa blanca desde la temporada 1989-90.