Sevilla/Zaragoza, 29 dic. 2017 (EFE).- El Real Betis Energía Plus cerrará este sábado ante el Tecnyconta Zaragoza un año convulso y para olvidar, en el que descendió deportivamente aunque luego fue repescado por la vía judicial, con la esperanza de iniciar una etapa más fructífera en 2018 apoyado en su reciente resurgir, con tres triunfos seguidos.
Los verdiblancos son colistas de la Liga Endesa igualados a tres victorias con el ascendido San Pablo Burgos y a solo una de cuatro rivales, entre ellos un cuadro zaragozano en crisis tras cinco derrotas seguidas, por lo que los sevillanos quieren aprovechar los nervios de su adversario para refrendar su mejoría y coger moral.
Además, los pupilos del entrenador Óscar Quintana, protagonista de la catarsis vivida por el equipo bético, son conscientes de que con un triunfo podrían abandonar el farolillo rojo y empezar a salir de los puestos de descenso, lo que supondría una gran inyección de ánimo para una tropa que ha sufrido mucho desde el inicio del curso.
Y es que los sevillanos encadenaron diez derrotas en las diez primeras jornadas y no fue hasta hace tres cuando, a base de garra, de orgullo y de los cambios operados en la plantilla, empezaron una particular resurrección a la que ahora quieren, a toda costa, dar continuidad.
Aún así, saben que no será fácil, que tendrán en frente a un "Tecnyconta Zaragoza agresivo", con buenos jugadores y con buenos mimbres en su plantel, como ha advertido Quintana, que por ello ha hecho un llamamiento a la afición cajista para que acuda al pabellón de San Pablo a apoyar a su gente porque la necesitan y porque así sería más fácil la victoria.
Tras registrar un récord negativo en la historia del club con diez derrotas seguidas, el equipo bético comenzó hace tres semanas una senda triunfal al ganar en su casa al Monbus Obradoiro (83-77), tras lo que llegaron dos victorias seguidas fuera en Murcia con el UCAM (63-70) y en Gran Canaria ante el Herbalife (83-90).
Por ello, en el Real Betis Energía Plus apuestan por seguir haciendo buena esa recuperación ganando a un Tecnyconta Zaragoza herido y necesitado, en un partido para el que Quintana pierde al base estadounidense con pasaporte irlandés Donnie McGrath, con una lumbalgia, aunque cuenta en principio, pese a sus molestias, con el alero serbio Rade Zagorac y el base estadounidense con pasaporte croata Dontaye Draper.
Por su parte, el Tecnyconta Zaragoza viaja a Sevilla con la necesidad de romper su mala racha de cinco derrotas consecutivas ante el colista de la Liga Endesa, el Real Betis Energía Plus, del que solo le separa un triunfo y al que alejaría un poco más en la clasificación.
Para los maños cerrar el año con una victoria supondría, además de quedarse con un buen sabor de boca, una inyección de moral para poder estrenar el año con la moral algo más alta a la vez que alejar un poco los fantasmas que empiezan a acosarlos.
La principal novedad de los zaragozanos para el partido ante los hispalenses es la reciente llegada durante al menos un mes del navarro Txemi Urtasun, un viejo conocido de la afición rojilla, que ha fichado para tratar de cubrir la importante baja del escolta Gary Neal, que se lesionó en el bíceps femoral de la pierna izquierda el último partido.
Por otro lado, en el club maño confían en que después de dos semanas de trabajo y un par de partidos ya disputados, el base estadounidense Bo McCalebb sea capaz de empezar a ofrecer su mejor nivel.
Para el entrenador de Tecnyconta Zaragoza, Jota Cuspinera, ahora se trata de recuperar la mejor versión de un equipo que firmó de una tacada las cuatro victorias que refleja su casillero, pero que ha vuelto a caer en el pozo en las últimas semanas.
"Si jugamos como los últimos cinco tenemos un problema porque no van a llegar las victorias. No he tocado apenas cosas del Betis porque si no sabemos resolver nuestras cosas, poco importa el rival", ha explicado en su comparecencia ante la prensa previa al desplazamiento a Sevilla.
Sobre la ausencia de Neal, el técnico de Getxo ha dejado claro que "tenemos que dar un paso adelante todos", a la vez que ha vuelto a insistir en que "las sensaciones son un toque para saber si lo que hacemos es suficiente".
"Tenemos que ser conscientes de que tenemos que dar más porque con lo que estamos dando no es suficiente", ha añadido el técnico rojillo.
Los puntos que aportaba Neal, máximo anotador del equipo, según Cuspinera "si no hay puntos en las manos tendremos que quitárselos al rival".
"Con Neal teníamos unas fortalezas, sin él otras y el rival tiene las suyas y tenemos que poner las circunstancias a nuestro favor. Es cuestión de encontrar siempre equilibrio", ha defendido.
En su opinión, la clave para que su equipo se reencuentre con la victoria es que "cada uno haga lo que tiene que hacer para ganar aplicando las normas que tenemos. En ataque tenemos gran libertad, pero ésta conlleva una gran responsabilidad".
"La exigencia es volver a tener sensaciones porque será lo que nos ponga en disposición de ganar", ha concluido.