Manresa/Santiago de Compostela, 15 Oct. 2016 (EFE).- El ICL Manresa juega este domingo su segundo partido como local esta temporada, recibiendo al Rio Natura Monbus Obradoiro, con un técnico Ibon Navarro que tendrá a su disposición toda la plantilla, aunque Lluís Costa y Román Montañez tienen algunas molestias.
El equipo catalán espera mostrar frente a su afición su mejor cara, después de la derrota en la pista del Murcia. Así, Navarro ha explicado que en la pista catalana aspiran "a tener un plus más de energía y de acierto".
Asimismo, ha añadido que el ICL Manresa tiene "ganas de volver a jugar en casa y a hacer un buen partido para que la gente, que parece que está tan ilusionada, vea un equipo con el que se sienta identificada".
Eso sí, ha avisado que será "un partido muy complicado" y argumenta que el Rio Natura Monbus Obradoiro "es un equipo muy grande, con jugadores muy grandes y polivalentes".
Será un partido de "novatos", con muchos jugadores nuevos en la Liga Endesa por parte de los dos conjuntos. El técnico del ICL Manresa considera que el Rio Natura Monbus Obradoiro es distinto, porque "ha cambiado las piezas y, sobre todo, porque los interiores tienen mucho talento". También ha destacado especialmente el potencial de Rosco Allen y Shayne Whittington.
Navarro tampoco se ha olvidado de la baja de Alberto Corbacho y lo considera clave para explicar la situación de los gallegos, que llegan a Manresa con tres derrotas.
"Todo necesita su proceso y seguramente todavía no han llegado a ese punto en que todo encaja", ha precisado el entrenador del Manresa, que no descarta ver debutar en el Nou Congost a la última incorporación del Rio Natura Monbus Obradoiro, Deividas Dulkys, porque "han aligerado un poco lo carga táctica, sobre todo en ataque".
"Es un jugador muy fuerte, muy atlético, con buenas manos para robar el balón y por encima de todo un tirador muy rápido", ha añadido.
Por su parte, los gallegos, plagados de bajas, pretenden dar el salto hacia la victoria que no logró en las tres primeras jornadas.
El conjunto compostelano se desplaza sin los lesionados de larga duración Txemi Urtasun, Alberto Corbacho y Nacho Llovet, que sufre una rotura de fibras y está en la recta final de la recuperación.
Pepe Pozas, el base suplente, tiene un tobillo que no está totalmente recuperado y la última incorporación, Deividas Dulkys, todavía no está listo para jugar.
En esta situación, el viaje al Nou Congost se antoja complicado, aunque el técnico, Moncho Fernández, ha subrayado durante toda la semana que su equipo pudo ganar los dos últimos encuentros con estas bajas y que ahora está capacitado para vencer.
Se ha quejado de que en estos dos encuentros, ante el Iberostar Tenerife y el Movistar Estudiantes, el Rio Natura Monbus Obradoiro peleó hasta el final y llegó con opciones hasta el último minuto, pero no las pudo materializar.
Fernández ha recordado que el equipo mejoró en la faceta defensiva y en la intensidad, pues los numerosos jugadores debutantes en la Liga Endesa cada vez conocen mejor la competición y esta progresión continuará.
Reconoce falta de acierto ofensivo, por las bajas de los tiradores, pero dice que, sin embargo, el equipo puede sumar y espera hacerlo pronto, pues de momento repite sus peores inicios históricos.
En ese sentido, el Nou Congost fue un cancha que ya sonrió al Rio Natura Monbus Obradoiro en 2009, cuando llegó allí sin haber ganado nunca a domicilio y consiguió ganar, si bien en aquella temporada ya había conseguido una victoria en casa.
Una vez más, el equipo compostelano apostará por la intensidad defensiva durante los cuarenta minutos que sirva para lograr comodidad en ataque, donde los aleros y los interiores deben dar un paso adelante.