Manresa (Barcelona, 23 abr 2016 (EFE).- El ICL Manresa recibe este domingo al Unicaja con la esperanza de poder competir y tumbar a otro de los equipos de Playoff, y continuar con paso firme este abril, en el que ha firmado tres victorias en cuatro partidos, lo que les ha alejado de las posiciones de descenso.
Para el partido, el entrenador de los catalanes, Ibon Navarro, avisa que será un partido muy difícil "contra un equipo con un físico de Euroliga y con mucho talento".
Por eso, considera que el encuentro "es una prueba mental, un reto para nosotros, de estar preparados para hacer cosas bien y aunque no saquemos fruto, pero seguir trabajando y confiando y esperar nuestro momento".
Navarro destaca especialmente la batalla en el rebote -"es el mejor equipo de Europa en rebote ofensivo", recuerda- y pide a los suyos que si no consiguen capturar el rebote defensivo, "no nos caigamos y seamos capaces de volver rápido a ponernos a defender. Tenemos el reto de jugar como queremos, no a lo que ellos quieren y nos dejen. Hay un montón de pequeños partidos dentro del partido que si somos capaces de competir en algunos de ellos, al igual al final somos capaces de ganar".
De la última victoria catalana, en la pista del UCAM Murcia, el técnico destaca "la solidez mental" que mostró su equipo, pero alerta que en ese caso "en ningún momento estuvimos en desventaja. El paso siguiente es vernos en desventaja y tener la madurez de seguir para volver a meternos en el partido".
Para ello, Navarro pide el mismo ambiente y apoyo de la afición que en el partido contra el Tenerife. "Casi salimos con 10 a 0", recuerda.
Navarro tendrá las bajas seguras de Román Montañez y Àlex Barrera y, aunque han seguido con molestias, se espera que Marius Grigonis y Dejan Musli puedan participar con normalidad.
También estará la última incorporación del club del Bages, Nemanja Jaramaz. Sobre él, el entrenador cree que es difícil que repita la actuación de su debut y explica que los jugadores nuevos como él tienen "un efecto champán: llegan y tienen mucho impacto en el juego. Luego la cosa se asienta y todo el mundo va encontrando su espacio".
Añade también que Nemanja Jaramaz es un jugador "con mucho talento, con mucha calidad. Él no ganará los partidos, será el juego del equipo el que se tendrá que hacer valer, pero está claro que puede hacer mejores a sus compañeros".
El Unicaja está en plena lucha por mantenerse entre los ocho primeros que disputen la fase por el título y los catalanes en la de asegurarse la permanencia.
El equipo malagueño se impuso en la pasada jornada como local al Morabanc Andorra (82-71) y ello le ha aupado a la sexta plaza de la clasificación con quince triunfos, mientras que la formación manresana logró una importante victoria en la cancha del UCAM Murcia (73-75) que le tiene decimocuarto en la tabla con diez triunfos, tres por encima de los puestos de descenso.
En el balance histórico, el Unicaja ha ganado en quince de las 34 ocasiones que se enfrentó al conjunto manresano como visitante y el último precedente fue derrota, pues la pasada temporada los locales vencieron por 80-76.
Además, el equipo que entrena Joan Plaza no gana como visitante desde el pasado 20 de marzo, cuando vapuleó al Laboral Kutxa por 56-83, y en el último desplazamiento cayó frente al Movistar Estudiantes por 91-84, lo que dificultó la clasificación para la fase por el título, aunque en la actualidad la diferencia con el noveno clasificado, el UCAM Murcia, es de dos triunfos.
Por ello, el Unicaja viaja a tierras catalanas con precaución debido al varapalo que sufrió en esa última salida a Madrid y no se fía del ICL Manresa, que en su último partido como local se deshizo del Iberostar Tenerife.
El conjunto manresano cuenta con el pívot serbio Dejan Musli, que destaca como segundo jugador más valorado de la Liga Endesa, lo que preocupa a los de Plaza.
El técnico del Unicaja tendrá las ausencias del escolta estadounidense Jamar Smith, prácticamente recuperado de una lesión de tobillo pero aún no al cien por cien; y el base serbio Stefan Markovic, que todavía sigue con molestias físicas.