Redacción, 2 Ene. 2016 (EFE).- El Retabet.es GBC, después de su dolorosa derrota en Zaragoza, ve como el tiempo para reconducir su peligrosa situación se agota y está obligado a buscar el primer triunfo en casas de la temporada ante un ICL Manresa que mira hacia arriba.
Los donostiarras emitían buenas señales tras la victoria que lograron en Tenerife, la primera de la competición, y después de hacer un buen partido en el derbi vasco contra Laboral Kutxa, pero la inesperada derrota ante el CAI de la última jornada ha dejado muy tocado al vestuario.
Porfi Fisac vuelve a encontrarse en la tesitura de tener que acertar sin margen para el error porque los rivales con los que compite por la lucha por la permanencia- Estudiantes y el propio CAI en estos momentos- están a un paso de escaparse de forma definitiva.
El conjunto vasco está obligado a ganar de forma recurrente y no hay un camino menos complicado que hacerlo ante su público, que esta temporada no se ha llevado más que disgustos.
Fisac tendrá que volver a dejar fuera de convocatoria a uno de sus extranjeros -Milbourne, Landry o Agbelese- un auténtico lujo para un conjunto necesitado de todo tipo de virtudes en las diferentes áreas de juego.
Si los vascos vuelven a retomar buenos momentos defensivos y el acierto en ataque es normal, al menos tendrán opciones de darle un susto a un Manresa que es una de las revelaciones de la temporada.
El ICL Manresa visita la pista del RETAbet Gipuzkoa, último clasificado, con el ruso Dimitry Flis renovado hasta final de temporada, el retorno de Dejan Musli y la baja de Jermaine Thomas, que sigue lesionado de la espalda, como principales novedades.
Después de la contundente derrota en Málaga, el Manresa, con sus seis victorias, quiere confirmar su buena forma con una victoria en casa del peor de la competición.
Sin embargo el entrenador, Ibon Navarro, no se fía del balance del Gipuzkoa, que solo ha ganado un partido, y asegura que los vascos han sido "víctima de un calendario muy duro" en este inicio de campeonato.
"Eso les ha supuesto encadenar cinco derrotas, comprensibles pero dolorosas y seguidas y que los ha metido en una dinámica mala", ha dicho.
Navarro cree que los guipuzcoanos mejorarán con la incorporación del pívot Agbelese, pero en especial con el ex-Manresa Marcus Landry, según el técnico "una de las estrellas de la liga ACB".
El entrenador del ICL añade que "a la gente le puede parecer un partido fácil" pero avisa que los de Porfirio Fisac "son un buen equipo, con muchos jugadores que conocen muy bien la liga, muy expertos y que saben jugar este tipo de partidos".
Navarro apunta que "es un partido que queremos ganar, que tenemos que ganar", porque "la liga te pone en tu sitio y es muy complicada, ya que ganas un partido y como saques pecho te meten un golpe y te lo hunden".
"Para nosotros no hay ningún partido en que pensemos que lo podemos ganar seguro. Ganando en San Sebastián y con seis victorias, no estamos salvados, queda mucho camino por andar. Y yo veo cómo están los equipos de abajo, como se están reforzando y van a crecer. Todo el mundo va a mejorar y si nosotros nos paramos, nos cogerán y nos pisarán", ha apuntado.
A pesar de las dificultades, las presiones y las lesiones -el club no sabe aún si conseguirá un sustituto para la baja de Thomas-, el entrenador cuenta que ve bien a sus hombres.
"Físicamente estamos bien, concienciados del partido que tenemos. Tenemos tres victorias fuera de casa en tres canchas difíciles y vamos a intentar ganar fuera de casa otra vez", ha insistido Navarro que de jugar la Copa, no quiere ni hablar: "nosotros la veremos por la tele".
