El Iberostar Tenerife frenó al Unicaja, que llevaba cuatro triunfos seguidos -dos en la Liga Endesa y dos en la Eurocopa-, y con su triunfo por 79-86 refrendó que sigue siendo la gran pesadilla de los malagueños en un partido frenético y con el excajista Giorgi Shermadini de protagonista, con 22 puntos y 31 de valoración.
En un partido de reencuentros, con el regreso de Shermadini, Sasu Salin y Dani Díez a la pista del José María Martín Carpena, y en el que el base Alberto Díaz fue el más destacado del conjunto local con 19 puntos, el Unicaja comenzó fuerte, pero se hundió en el tercer cuarto y luego, pese a su reacción, le resultó imposible evitar la victoria de un solvente Iberostar Tenerife.
Los primeros minutos fueron muy buenos en defensa para los cajistas, que con un parcial de 5-0 se pusieron por delante y mandaron con el acierto desde la línea de 6’75 de Díaz, Dean Thompson y Axel Bouteille (14-6, m.5).
Los tinerfeños replicaron con el mismo juego que los malagueños y el liderazgo de Aaron Doornekamp en los tiros triples, ya que, junto a Shermadini bajo el aro, recortaron distancias (16-14) y obligaron al técnico local Luis Casimiro a parar el tiempo en el primer tramo del choque, que finalizó con un 19-19 en el luminoso.
Con un buen juego combinado y manteniendo una férrea defensa, el Unicaja siguió sumando y gozó de su máxima renta (29-19) en el ecuador del segundo cuarto.
Aún así, el encuentro fue una copia de lo vivido en el primer asalto porque los de Txus Vidorreta no dieron tregua y volvieron a apoyarse en Doornekamp y Shermadini para recortar distancias y volver a empatar el partido (37-37) a falta de 1:47 para el descanso, que acabó a favor de los locales con una ‘bombita’ de Francis Alonso (44-40, m.20).
Díaz y Thompson asumieron la responsabilidad en el ataque malagueño y con dos triples consecutivos volvieron a poner al Unicaja con un +10 sobre el electrónico (50-40), tras lo que Salin se estrenó con un triple y el partido se estancó en el 54-50, pero mantuvo el ritmo frenético sobre la pista.
El Iberostar elevó su intensidad defensiva para frenar a los cajistas en los 56 puntos y forzó a Casimiro a pedir dos tiempos muertos prácticamente consecutivos, cuando los tinerfeños lograron una ventaja de 6 puntos y Marcelinho Huertas hizo un roto en la defensa verde para cerrar el tercer cuarto con un 59-64.
Los de Tenerife siguieron mandando con un parcial de 2-11 que les permitió a los de Vidorreta imponer su máxima renta en el partido con un +14 y noquear a un Unicaja nada cómodo sobre la pista (61-75), en el que solo Alberto Díaz frenó el vendaval chicharrero con un triple.
El canterano lideró la reacción cajista, sumó de tres en tres y acortó la diferencia a 73-79, lo que obligó al técnico amarillo a pedir tiempo a falta de 3 minutos para el final, en un tramo decisivo en el que Marcelinho Huertas amarró prácticamente el triunfo de los canarios (75-86, a falta de un minuto) en un partido que acabó con 79-86.
79 - Unicaja (19+25+15+20): Bouteille (10), Díaz (19); Thompson (18), Alonso (5), Guerrero (2) -cinco inicial-, Waczynski (5), Suárez (-), Brizuela (8), Santos (-), Abromaitis (10), Gerun (-) y Nzosa (2).
86 - Iberostar Tenerife (19+21+24+22): Doornekamp (22), Fitipaldo (3); Shermadini (22), Butterfield (-), Cavanaugh (12) -cinco inicial-, López (-), Díez (-), Sulejmanovic (-), Guerra (2), Huertas (16), Rodríguez (-) y Salin (9).
Árbitros: Zamorano, Cortés y Lucas. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 7 de la Liga Endesa, disputado a puerta cerrada en el Palacio de Deportes José María Martín Carpena de Málaga