Crónica

Festival del Real Madrid para forzar el desempate (102-82)

¡El finalista se decidirá el sábado en Vitoria! El Real Madrid salvó el matchball dando una auténtica exhibición ante el TAU Cerámica: 102-82. Los blancos corrieron, se divirtieron y dieron espectáculo para barrer al cuadro baskonista y forzar el decisivo desempate

Massey, todo potencia, salta por encima de todos los rivales (Foto EFE)
© Massey, todo potencia, salta por encima de todos los rivales (Foto EFE)
  



Redacción, 4 Jun. 2009.- El Real Madrid sigue vivo en la lucha por el título. Respaldado por 11.500 aficionados y la presencia de su nuevo presidente, Florentino Pérez, el conjunto blanco ha derrotado al TAU Cerámica por 102-82 y fuerza el tercer y decisivo encuentro, este sábado en el Buesa Arena.

Lo del Real Madrid este jueves fue una exhibición. Comodísimo en su estilo de juego y llevado en volandas por su afición, no dio opción al líder de la Liga Regular, arrollándole en juego y resultado para poner la eliminatoria donde quería, en un partido a todo o nada en Vitoria. El “minuto imposible” de 2005 flota en el ambiente.

Los blancos hicieron un partido perfecto, defendiendo, haciéndose fuertes en el rebote y corriendo como si les fuera la vida en ello. Contraataque a contraataque, fueron abriendo una brecha que se convirtió en definitiva con un arranque increíble del tercer cuarto, en el que anotó en sus 12 primeros ataques, consiguiendo un parcial 27-9 en apenas siete minutos y disparando su renta hasta cotas de hasta 30 puntos.

El TAU apenas pudo hacer nada ante el vendaval de un Real Madrid hoy muy superior, demostrando que su sello, su forma de jugar y su carácter siguen intactos y con la final y el título entre ceja y ceja.



Felipe y el Madrid comienzan mandando
El Real Madrid saltó al parqué motivadísimo y con su líder, Felipe Reyes, a su mejor nivel. Cuatro puntos del internacional abrieron la veda para el cuadro blanco, lanzado de inicio (6-0) y al que el TAU sólo podía replicar con la calidad de Mickeal y la capacidad resolutiva de un Splitter imparable bajo tableros. Suficiente para igualar (6-6, 8-8 y 11-11) pero no para ponerse por delante... Mumbrú se ocupaba de que no le fuera posible. El primer periodo del alero catalán fue simplemente perfecto, con seis puntos y 13 de valoración, haciendo muchísimo daño con su calidad y versatilidad.

Pero el problema del TAU no estaba tanto en ataque como en defensa. No lograba contener el juego blanco e Ivanovic buscaba alternativas, con muchos minutos en el banquillo para Igor Rakocevic. Cuando, con 22-20 adverso, Splitter cometió su segunda falta y acompañó a Reyes (dos personales en el minuto 8) viendo el partido desde el banquillo, el conjunto vitoriano se resquebrajó.

Velocidad y ventaja blanca
El Real Madrid aprovechó la falta de referentes baskonistas y puso el turbo. Velocidad, velocidad y más velocidad. Una serie de contraataques a toda mecha, sin miedo ni ataduras. Cualquiera era capaz de llevar o culminar la contra, desde Massey a Van den Spiegel, y el partido iba tomando cada vez un cariz madridista más claro.



El TAU, deslabazado, actuaba con un quinteto Lucas-San Emeterio-Vidal-Baldo-McDonald y sólo Vidal podía iluminar algo el ataque, sumando nueve puntos y evitando una prematura ruptura del partido. Se puede decir que sobrevivía. Ni siquiera el retorno de Splitter y Rakocevic (0 puntos y –7 de valoración al descanso) aliviaba la crisis, y cuando el Real Madrid volvía a encadenar dos contraataques y se iba al descanso 44-34 arriba, el resultado sólo hacía justicia a lo visto en la pista.

Exhibición del Real Madrid tras el descanso
La reanudación trajo los primeros puntos de Igor Rakocevic, rápido curando la herida de los primeros 20 minutos... pero también un creciente festival ofensivo del Real Madrid. Sí, aun mejor que en la primera mitad. Triple de Hervelle. Y de Mumbrú. Y ahora canasta de Reyes. ¡Y de Bullock! Cuatro ataques hiperproductivos: 10 puntos sin fallo y +18 en el electrónico (54-36).

18 puntos de diferencia y 18 minutos por jugarse. El TAU había de apelar al milagro y Teletovic parecía apuntarlo con un triple a tabla, pero Raül respondía con otro no menos difícil, sin bajar el balón tras recibirlo muy arriba (60-41, m.23).

El Real Madrid no miraba atrás y con el 1-1 en el bolsillo, empezaba a buscar en el diccionario el término ‘paliza’. En un momento, parcial de 15-1 y +30 (75-45, m.28), con 25 puntos anotados en menos de seis minutos. Una exhibición, confirmada con 12 ataques consecutivos, los primeros del tercer periodo, sumando en ataque.

Una recta final sin nada por decidir
El conjunto madridista ya tenía la victoria en el bolsillo y era el momento de seguir divirtiéndose y hacer disfrutar a la grada con el espectáculo. Triple tras triple, con genialidades de Raül López y sin bajar el ritmo, mantuvo una clara ventaja pese a los esfuerzos del TAU por maquillar el resultado.

Y eso que Sergi Vidal estaba a un nivel impresionante, con canastas inverosímiles y de puro genio, siendo con diferencia el jugador más valorado de los de Ivanovic. Lucas y San Emeterio pusieron también su ‘chispa’ para aliviar a un TAU ‘grogui’ y que acabó cediendo por 102-82.