Tal día como hoy, hace 49 años (8 de febrero de 1976), Walter Szczerbiak firmó el récord de anotación en un partido de Liga tras encestar 65 puntos ante el Breogán. En aquel momento no existía la línea de tres, por lo que toda su anotación se fraguó en tiros de dos (25 de 27) y libres (15 de 17). Szczerbiak fue un prodigio anotador desde que se enfundó la camiseta del Real Madrid (que vistió entre 1972 y 1980), de la mano del también legendario entrenador Pedro Ferrándiz (q. e. p. d.; ambos posan en la foto que ilustra este artículo).
La gesta de la leyenda del Real Madrid no ha podido ser batida en estos casi cincuenta años. De hecho, nadie se ha acercado. En lo que va de siglo XXI, la mejor marca anotadora corresponde a Sylven Landesberg, que fue capaz de anotar 48 puntos el 1 de abril de 2018 con el Movistar Estudiantes en la cancha del Barça. El extraordinario alero hizo una estadística prodigiosa: 7 de 11 en tiros de dos, 8 de 11 en triples y 10/11 en libres, jugando más de 35 minutos. E incluso así, se quedó a 17 tantos de la marca de Szczerbiak.
Desde la exhibición de Landesberg, solo cinco jugadores han anotado 40 o más puntos en un partido de Liga Endesa: Nico Laprovittola (40, 2019), Askia Booker (40, 2019), Jerrick Harding (41, 2023), Kassius Robertson (44, 2023) y Marcelinho Huertas (43, 2023).
En era acb (1983 en adelante), el tope lo sigue ostentando Juan Antonio San Epifanio, Epi, con sus 54 puntos en un Barça-Joventut con dos prórrogas (112-109) de 1984, justo la temporada anterior a la inserción de la línea de tres puntos en el basket FIBA.