Redacción, 26 Abr. 2002.- El Unicaja recibe al Real Madrid en un partido apasionante en el que se darán cita dos de los equipos más en forma de la Liga ACB y que pelean por terminar la Liga Regular en la segunda plaza, si bien el Unicaja tampoco ha descartado acabar en lo más alto.
Unicaja es favorito, pues llega al encuentro con la vitola de mejor equipo de la segunda vuelta y en gran estado de forma como demostró en los últimos días venciendo en Barcelona y Lleida. Pese a los buenos resultados obtenidos y la grata imagen ofrecida a sus aficionados, los malagueños pueden acusar el cansancio de dos partidos tan duros, algo que no le ha sucedido a su rival.
Y es que el Real Madrid ha disputado dos choques menos exigentes, derrotando con comodidad pero sin excesiva brillantez al Cantabria Lobos y al Caja San Fernando. El equipo blanco, sin embargo, tampoco está en su mejor situación física, ya que acaba de recuperar tras sus lesiones a Iker Iturbe y Lucio Angulo, mientras que Zan Tabak, que podrá jugar el sábado, no pudo ser alineado el miércoles por culpa de una inoportuna indisposición.
La batalla tiene tres puntos principales de interés. El primero, la durísima lucha que se producirá bajo tableros, con las torres malagueñas pugnando con Edu Hernández, Tabak, Struelens e Iturbe. No se debe obviar el enfrentamiento entre el talentoso y cerebral Djordjevic y el poderoso Mous Sonko, que pasa por un momento de forma excelente, ni tampoco el esfuerzo que tendrá que hacer el Real Madrid para frenar a Milan Gurovic, un jugador cuyas características le hacen mucho daño.
Si Unicaja obtiene la victoria, se asegurará el segundo puesto y podrá centrarse únicamente en pelear por la primera plaza. Sin embargo, una derrota supondría ver reducida su ventaja respecto al Real Madrid a una victoria y con el basket-average favorable para los blancos, lo que auguraría un final de temporada cardiaco. Ese es el objetivo del Real Madrid, que quiere repetir por tercer año consecutivo la segunda plaza en la Liga Regular y que, en caso de derrota podría verse en una situación complicada de cara a siquiera mantener la 3ª plaza.
En el recuerdo de ambos equipos está el choque de la primer vuelta, en el que el Unicaja dejó escapar una renta importante para acabar perdiendo por 62-60. El equipo malagueño trató de mantener su ventaja y jugó un baloncesto lento, de lo que se aprovechó Sasha Djordjevic, decisivo en los últimos minutos