Valencia, 5 mar. 2006 (EFE).- El Adecco Estudiantes logró una trabaja victoria en su visita al Pamesa Valencia en un choque en el que estuvo liderado por sus dos mejores promesas: Carlos Suárez, que con su trabajo se convirtió en el referente colegial en los dos lados de la pista, y Sergio Rodríguez, que controló el ritmo del choque en el último cuarto, cuando los visitantes dieron el golpe de gracia.
El Pamesa llevó el peso del encuentro durante buena parte del mismo pero le faltó tranquilidad, calidad e inteligencia para romperlo y en el tramo final le atenazó la crisis de resultados y juego que arrastra y que le ha llevado a encadenar su quinta derrota consecutiva como local, la peor racha de su historia en la ACB.
El choque comenzó presido por un duelo de pesos pesados bajo los tableros: Rubén Garcés tiraba del Pamesa y Will McDonald mantenía a los colegiales en el choque.
El equilibrio no duró demasiado porque encabezados por Dimos Dikoudis los jugadores del conjunto valenciano pronto se metieron en el choque y, en cambio, sólo Carlos Suárez acudió a echar una mano al estadounidense (24-17, m.10).
La gran labor del joven alero estudiantil en ambos lados de la pista no bastó para darle la vuelta al choque pero sí para igualarlo y permitir después que la creciente inspiración ofensiva de Iker Iturbe situara durante unos segundos por delante en el marcador a los visitantes (31-32, m.14).
Pero el Pamesa no se vino abajo y al Adecco le faltaron argumentos para derrumbarlo. Ricard Casas, técnico local, recurrió de nuevo al músculo de Garcés y apostó por una defensa zonal que complicó los ataques estudiantiles.
Además, Vule Avdalovic y Mindaugas Timinskas lograron serenar la labor ofensiva del conjunto valenciano y le permitieron coger aire antes del descanso (45-40, m.20).
Tras el intermedio, el Pamesa golpeó de nuevo al Adecco Estudiantes pero esta vez desde la línea de tres puntos. Tres triples casi consecutivos que le pusieron en disposición de romper el choque pero Nacho Azofra no le dio tiempo a hacerlo, rápidamente engrasó la maquinaria de los visitantes y puso a producir a Suárez y a Carlos Jiménez.
El partido seguía alocado y sin un dueño claro. Las rachas de ambos equipos se sucedían desordenadas y vertiginosas y el encuentro llegó igualado al último cuarto (64-62, m.30).
Al Pamesa comenzó a pesarle la presión de no haber roto el encuentro cuando tuvo la oportunidad. Hernán Jasen e Iturbe castigaron sus lagunas defensivas desde la línea de 6,25 y Casas se vio obligado a pedir un tiempo muerto para frenar la descomposición de los suyos (66-70, m.34).
Pero Sergio Rodríguez ya le había cogido el pulso al encuentro y no lo cedió hasta que el cronómetro se puso a cero. El base canario dominó el juego con comodidad y desquició a un Pamesa tan desbordado como voluntarioso pero sin ninguna capacidad de reacción. Al final, bronca de sus sufridos aficionados.
81 - Pamesa Valencia (24+21+19+17): Avdalovic (11), Luengo (4), Timinskas (17), Dikoudis (11), Garcés (19) -cinco titular-, Harrington (3), Miralles (2), Sklavos (9), Yebra (5) y Stoykov (-).
88 - Adecco Estudiantes (18+22+22+26): Azofra (6), Suárez (21), Jiménez (7), Iturbe (15), Mc Donald (17) -cinco titular-, Jasen (7), Sergio Rodríguez (15), Bueno (-), Mendiburu (-) y Vidaurreta (-).
Arbitros: De la Maza, Llamazares, Araña. Sin eliminados.
Incidencias: partido correspondiente a la vigésimo segunda jornada de la Liga ACB disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 6.800 espectadores.