Por Jorge Muñoa. Madrid, 8 may. 2004 (EFE).- Parece claro que madridistas y colegiales han olvidado su mejor baloncesto en eliminatoria fraticida. La han atiborrado de rivalidad y de tensión, pero de la que menos gusta, de la tosca. Puede que la importancia del objetivo en juego, que más allá del título es la clasificación para la próxima Euroliga, les atenaza.
Sólo un reducido grupo de jugadores en cada equipo está en la onda. Los demás, algunos porque han pasado así la temporada, otros porque la eliminatoria les ha cogido en un mal momento, son impredecibles, no se sabe por donde van a salir.
La oportunidad del 2-0, o sea, de la sentencia casi definitiva -hasta ahora lo ha sido siempre-, presentó un Madrid caótico, que malvivió hasta el descanso gracias al abismal talento del estadounidense Elmer Bennett y el acierto en los tiros libres (13/13) y que se marchó al vestuario con diecisiete puntos de desventaja (34-51).
La amenaza de esa segunda derrota con tintes de cataclismo que pesaba sobre el Estudiantes sentó bien al equipo de José Vicente Hernández. Aunque el estadounidense Corey Brewer tuvo que marcharse muy pronto de la cancha por un golpe en el labio que le hizo sangrar abundantemente, los azules acudieron al parqué con mucha mejor actitud defensiva, con más ambición y, además, con una de las mejores versiones del norteamericano Andrae Patterson que recuerda (diecisiete puntos en la primera parte).
El Madrid anduvo los dos primeros cuartos perdido entre las cuitas del mismo Patterson, Hernán Jasen y alguno más con Antonio Bueno, que inyectaron esa tensión chusca al encuentro, y la inoperancia de ciertos de sus elementos que, en realidad, restan más que suman.
El otro que, como Bennett, está siempre con la mente, la ambición y el talento donde deben, Alberto Herreros, volvió a salir al rescate de los suyos en el tercer cuarto. Clavó los dos primeros triples que intentó y empezó a devolver el color al rostro de su equipo, que había tenido diecinueve puntos en contra (34-53).
Herreros enchufó al Madrid y, encima, Felipe Reyes le tiró un capote. Le señalaron una falta en ataque por empujar a Kaspars Kambala, el banquillo colegial le sustituyó y camino de la banda se calentó y empujó de nuevo al letón, lo que le costó una técnica al banco. En esa secuencia de acciones los blancos se colocaron a diez puntos (48-58 m.25).
Pero en el Adecco Estudiantes había más personal con la actitud necesaria y el acierto oportuno para devolver las aguas a su cauce. Nikola Loncar, Patterson, Iturbe.....Catorce puntos de distancia hacían justicia a la realidad del partido con el último periodo por delante (54-69).
El Madrid fue incapaz de rehacerse, de jugar a un nivel aceptable, y los colegiales firmaron el empate sin mayores agobios, con una tranquilidad que debería preocupar, y mucho, a Julio César Lamas. Si los blancos continúan en la misma línea, el próximo jueves, día del cuarto duelo, dirán adiós al título y a la Euroliga.
Lamas: 'Ahora todo empieza de nuevo'
El argentino Julio César Lamas, entrenador del Real Madrid, cree que la eliminatoria frente al Adecco Estudiantes, tras el empate a uno, "vuelve a empezar de nuevo" el próximo martes, fecha del tercer encuentro, que se disputa en Vistalegre a partir de las 20.45 horas (La 2).
"El Adecco Estudiantes ganó de manera justa. Jugó bien, tuvo un alto nivel de acierto y nosotros jugamos mal, perdimos muchos balones y también la lucha por el rebote. Esas son las razones por las que ganó el Adecco Estudiantes", señaló Lamas.
El argentino reconoció que el Real Madrid "jugó mal. Nueve meses después de haber empezado no es ningún misterio que el Real Madrid para tener opciones de victoria tiene que jugar como bloque".
"Hay cosas que se hicieron muy mal y hay que solucionarlas para el martes. Estamos uno a uno y ahora empieza todo otra vez. Se neutralizan las victorias conseguidas. Duele perder por veinticinco en casa, pero los jugadores, los equipos y los entrenadores que valen saben levantarse. Es importante saber levantarse después de una derrota", afirmó el preparador blanco.
Para Lamas el Real Madrid "no es un equipo que pierda balones y en los dos partidos contra Estudiantes se han perdido muchos. En el rebote también hay que corregir bastante el juego para tener opciones el martes".
Antonio Bueno explicó que "el partido fue igualado en el primer cuarto. Luego, en el segundo, el Estudiantes cogió una ventaja muy importante y, luego, hasta el final, el equipo intentó recuperarla, pero no pudo".
"Son partidos con mucha tensión y a veces la tensión sale por esos sitios, pero no creo que haya que darle más importancia", señaló Bueno, con quien los jugadores estudiantiles tuvieron varios roces.
"El rebote ha sido una de las claves, pero esto no nos va a afectar de ninguna manera. El martes saldremos igual que si hubiéramos ganado. Vamos a salir a Vistalegre para ganar", adelantó el internacional español.
Hernández: 'Jugamos un partido inteligente'
Jugamos un partido inteligente José Vicente Hernández entrenador del Adecco Estudiantes, destacó la inteligencia de su equipo para jugar y ganar al Real Madrid en "un partido de tensión" que supone el empate a una victoria en la serie madrileña de cuartos y la recuperación del factor cancha para los colegiales.
"Jugamos un buen partido, un partido de tensión, algo completamente lógico. Tenemos que imponer nuestra defensa, y lo conseguimos, para dejar al Madrid con pocos puntos en algunos cuartos. Así podemos jugar con más velocidad. Fuimos inteligentes para aguantar los arreones lógicos del Real Madrid", señaló el preparador estudiantil.
Hernández también consideró que su equipo fue inteligente para evitar "cadenas de errores y no descentrarse por algunas circunstancias que se dieron en el partido. Lo que menos importa es la diferencia, lo que importaba era ganar".
"De donde tenemos que sacar las consecuencias es de los momentos en los que ganábamos por diez o doce puntos. Ver lo que hacíamos ahí para tener esa ventaja", añadió Hernández.
El ex madridista Iker Iturbe, uno de los máximos anotadores de la tarde en el Raimundo Saporta con dieciocho puntos, aseguró que el partido fue "bastante más duro y difícil de lo que refleja el marcador. El equipo trabajó bien los cuarenta minutos, algo que no ocurrió en la primera parte del primer partido".
"Los partidos van a seguir siendo así, bastante más duros y sin tanta ventaja al final. Si seguimos jugando así tendremos una opción de ganar. Estamos jugando cuartos de final en un derbi y en estas circunstancias va a haber de todo. Van a ser partidos duros física y mentalmente y no espero menos del próximo", vaticinó el alero vitoriano.
70 - Real Madrid (18+16+21+15): Bennett (19), Herreros (20), Stojic (4), Burke (5), Kambala (10) -cinco inicial-, Mumbrú (2), Bueno (1), Fotsis (9) y Núñez (-).
95 - Adecco Estudiantes (22+29+18+26): Brewer (8), Misó (7), Jiménez (3), Reyes (7), Patterson (19) -cinco inicial-, Azofra (3), Jasen (8), Iturbe (18), Vidaurreta (6) y Loncar (16).
Arbitros: Martín Bertrán, Alzuria y Guirao. Excluyeron por personales a Bueno (m.36), Kambala (m.37). Señalaron técnica a Felipe Reyes por empujar a Kaspars Kambala (m.24) y al entrenador del Real Madrid, Julio César Lamas, por aplaudir una decisión arbitral (m.37).
Incidencias: segundo encuentro de las eliminatorias de cuartos de final por el título de la Liga ACB disputado en el Pabellón Raimundo Saporta ante unos 5.000 espectadores. Antes del inicio del encuentro, el presidente de la Asociación de Veteranos del Real Madrid, Emiliano Rodríguez, entregó a Elmer Bennett el trofeo que acredita al base estadounidense como el líder de asistencias de la primera fase de la temporada.