Valencia, 6 Dic. 2014 (EFE).- El Valencia Basket recibirá este domingo en la novena jornada de la Liga Endesa al Laboral Kutxa y lo hará necesitado de un triunfo para no complicarse su presencia en la Copa del Rey pero también pendiente del decisivo duelo de la próxima semana en la Euroliga en la pista del equipo vasco.
El equipo valenciano afronta este duelo tras haber perdido el pasado viernes ante el Estrella Roja en un encuentro en el que volvió a perder la batalla física contra su rival y que le obliga a ganar sus dos últimos encuentros en el torneo continental y esperar otros resultados para poder pasar de ronda.
Pero aunque el duelo del viernes en el Fernando Buesa Arena es trascendental para el Valencia, el equipo de Velimir Perasovic tampoco puede descuidar su trayectoria en la liga, en la que ha ganado cinco choques y perdido cuatro.
Una derrota ante el equipo vasco igualaría el balance de ambos equipos y pondría al Valencia en una situación peligrosa a falta de siete encuentros para que se decidan los equipos que participarán en la Copa.
El equipo valenciano ocupa actualmente la séptima posición, la última que da derecho a disputar una cita para la que ya está clasificado como organizador el Herbalife Gran Canaria.
El Valencia y el Laboral Kutxa ya se enfrentaron hace un par de semanas en la Fonteta en la Euroliga en un duelo en el que los valencianos remontaron en la segunda parte y vencieron por 76-66 pero que se disputó antes de que el equipo vasco destituyera a Marco Crespi y ascendiera a Ibon Navarro al primer entrenador.
Este cambio ha hecho reaccionar al conjunto alavés, que ha ganado cuatro de sus seis encuentros con su nuevo entrenador y que ha perdido por un solo punto en las dos derrotas que ha sufrido. Aunque, ha fichado al base Mike James, no debutará porque aún no ha sido inscrito.
El conjunto valenciano mantendrá para este encuentro las bajas de Sam Van Rossom y Serhiy Lishchuk, que sufrieron sendas lesiones musculares y aún no están recuperados.
El Laboral Kutxa llega en busca de un triunfo que le acerque a la Copa del Rey y tratando de aprovechar los momentos de zozobra e irregularidad del equipo de Velimir Perasovic.
Los vitorianos, con cuatro triunfos en nueve partidos, quieren igualar las cinco victorias de los levantinos y meterse de lleno en la pelea por lograr el pasaporte al torneo copero en febrero.
El Laboral Kutxa llega desde Estambul tras lograr ante Galatasaray su primer triunfo como visitante de la temporada, 82-89, y dispuesto a sumar el segundo ante un Valencia que tropezó en la cita europea y ve muy complicado meterse en el Top 16.
El Baskonia espera enderezar su moral tras el espaldarazo de ser capaz de vencer al fin lejos del Buesa Arena y empezar la remontada hacia puestos más desahogados.
No va a contar para la matinal con el estreno de Mike James, que solo ha completado tres entrenamientos con sus nuevos compañeros y el técnico azulgrana va a optar por esperar una semana más para que asimile todos los sistemas.
El partido será un reencuentro entre Velimir Perasovic y quien fuera su ayudante Ibon Navarro, que llega ahora a las riendas del Baskonia tras la destitución de Marco Crespi hace tres semanas.
Será el duelo de mañana el primer plato de una doble ración entre ambos equipos que se verán de nuevo las caras el viernes en el Buesa Arena en un partido definitivo para que el Baskonia pueda clasificarse al Top 16 de la Euroliga y deje sin opciones a los taronja.