Crónica

El Real Madrid se muestra intratable frente al Coviran Granada (79-67)

El conjunto blanco sigue ampliando su racha y suma ya 26 consecutivas en su cancha, tras doblegar a un Coviran Granada que certifica plaza de descenso (79-67). Tavares (22 val), el mejor

acb Photo / Víctor Carretero
© acb Photo / Víctor Carretero
  

Granada no disfrutará de la Liga Endesa la próxima temporada al consumarse el descenso del Coviran, cuya derrota (79-67) ante un Real Madrid intratable en el Movistar Arena de la capital, con 21 victorias seguidas en la fase regular, certificó su despedida después de tres temporadas en la máxima categoría del baloncesto nacional.

Para mantener vivo el milagro de la salvación, el cuadro andaluz necesitaba ganar imperiosamente al líder y esperar a que el Bàsquet Girona cayera en su duelo ante el Barça en el Palau Blaugrana.

La ecuación se cumplió en lo referido al tropiezo del conjunto catalán, pero los de Pablo Pin fallaron en el primer requisito, en un encuentro en el que pusieron actitud, pero las prisas en algunas acciones, el desacierto en el triple -seis de 30- y el ir a remolque en el marcador desde el inicio les condenó a acompañar al Leyma Coruña en las plazas de descenso.

Después de varias semanas asomado al abismo, el equipo rojinegro llegaba al Movistar Arena en su mejor momento de la temporada, con tres triunfos en los últimos cuatro partidos, y convencido en poder exprimir sus posibilidades de seguir entre los grandes del baloncesto.

La ilusión, en cambio, se tambaleó de inicio, porque el Real Madrid, lejos de relajarse al tener el liderato ya amarrado y a pesar de no contar con jugadores clave como al bosnio Dzanan Musa, dejó claro que su aspiración era prolongar su racha positiva y empatar el récord de victorias seguidas en su feudo, con 26, las mismas que consiguió con Pablo Laso en el banquillo entre 2015 y 2017.

La prueba fue el 7-0 con el que los madridistas arrancaron el partido, con un Coviran Granada fallón que necesitó cinco minutos para anotar su primera canasta con un triple del francés Amine Noua, el más entonado de los andaluces con 19 puntos.

El 16-7 obligó a Pin a pedir un tiempo muerto para calmar los nervios de sus jugadores y tratar de aplacar la brecha con el fin de mantener las pulsaciones.

El 18-9 con el que acabó el primer cuarto evidenció la falta de ritmo del Coviran Granada, con solo cuatro canastas y ningún rebote ofensivo.

En el segundo acto, la tercera falta del estadounidense Scott Barmforth alargó las malas sensaciones y Pin, ante el 27-12, tuvo que volver a reprender al plantel para pedirles más agresividad y juego interior, cohibido ante la presencia en la pintura blanca del pívot Edy Tavares, que hizo valer el galardón de mejor defensor de la liga por quinta temporada seguida.

La diferencia aumentó hasta los 17 puntos (33-16) y fue cuando el Coviran Granada reaccionó consciente de que su vida en la competición empezaba a agotarse.

De la mano de Noua, del francés Jonathan Rousselle y del finlandés Elias Valtonen, en su partido cien en la Liga Endesa, un parcial de 1-11 hizo menguar la diferencia a siete puntos (34-27) al borde del descanso, ante un Real Madrid desorientado por la excesiva rotación y que se dejó contagiar por los malos porcentajes de tiro, sobre todo en el triple (uno de ocho).

Con más ganas que juego y sabedor de la derrota del Bàsquet Girona ante el Barça, el Coviran Granada regresó del descanso dispuesto a dejarse la piel, lo que se tradujo en el 46-41 en el minuto 25.

Los rojinegros estaban enganchados al partido y solo la precipitación impidió arrimarse más a un Real Madrid que parecía tener la mirada en la fase final de la liga.

El último cuarto echó a andar con 57-50, lo que hacía mantenerse vivo al cuadro andaluz, aunque mermado por las cuatro faltas de Giorgi Bezhanishvili y Barmforth y las imprecisiones en acciones claras ante el aro.

El triple de Rousselle (62-56) alivió algo el vértigo, pero la buena actuación del canterano madridista Hugo González, con seis puntos seguidos, volvió a agitarla y a poner contra las cuerdas a los de Pin (73-58, a cuatro minutos).

Con diez puntos por detrás a falta de un minuto, el cuadro granadino estaba condenado y solo le quedaba ver pasar los segundos para asumir que el milagro no había sido posible.

79 - Real Madrid (18+18+21+22): Campazzo (5), Abalde (2) Hezonja (21), Ndiaye (5), Tavares (11) -cinco inicial-, Llull (3), Hugo González (13), Feliz (6), Rathan-Mayes (2), Garuba (6), Bruno Fernando (5).

67 – Coviran Granada (9+18+23+17): Rousselle (11), Ubal (x6), Valtonen (6), , Noua (19), Bezhanishvili (2) -cinco inicial- Sergi García (11), , Bamforth (8), Visconti (2), Ndiaye (-), Guerrero (-) y Aurrecoechea (2).

Árbitros: Antonio Conde, Sergio Manuel y Raúl Zamorano. Eliminaron por faltas personales a Giorgi Bezhanishvili (m.37)

Incidencias: partido de la Jornada 33 de la Liga Endesa disputado en el Movistar Arena ante 6.712 espectadores. Al comienzo del partido, el pívot Edy Tavares recibió el galardón de mejor defensor de la fase regular de la Liga Endesa, que ha obtenido por quinta temporada seguida.