El Unicaja, haciendo un partido físico y coral, se citó con el Real Madrid en la final de la Supercopa Endesa después de ganar en la segunda semifinal al anfitrión, un UCAM Murcia que opuso una muy seria resistencia pero que acabó cediendo ante el poderío de los malagueños.
Kendrick Perry y Dylan Osetkowski se llevaron el protagonismo con 17 y 19 puntos, respectivamente. Se repetirá la pelea por el título en este torneo y en el mismo escenario un año después. En 2023 vencieron los blancos por 88-81.
Era un encuentro con cuentas pendientes y más aún después de que el UCAM apeara al Unicaja en las semifinales de la pasada Liga Endesa y además superándole a domicilio. El cuadro cajista, que descartó a dos interiores como Killian Tillie y David Kravish, salió más enchufado y acertado y con Tyson Carter, Perry, Osetkowski y hasta Olek Balcerowski viendo aro desde lejos (11-18).
Pese al 4/6 en triples de los de Ibon Navarro el cuadro grana se mantuvo firme en la pelea y, a base de defensa, logró cerrar el cuarto metido de lleno. Precisamente un triple de Ludde Hakanson y un contragolpe culminado porJonah Radebaugh sobre la bocina permitió al equipo dirigido por Sito Alonso cerrar el periodo por delante (21-20).
La afición murciana se estaba divirtiendo después de 10 minutos en los que el propio Radebaugh, con seis puntos, era el máximo anotador. La mejor puesta en escena de los de verde tuvo su réplica y el encuentro prometía emociones fuertes, lo habitual en los duelos entre estos equipos, que la pasada campaña se vieron hasta en nueve ocasiones en cuatro competiciones -Liga Endesa, contando la fase regular y el Playoff, Liga de Campeones FIBA y Supercopa Endesaa-.
Los universitarios, que dejaron sin vestir al base Dani García y tampoco utilizaron al pívot Moussa Diagne, no aflojaron en el comienzo del segundo cuarto y elevaron su parcial hasta el 14-2 y eso les hizo tener un +5 (25-20). A partir de ese instante el encuentro se convirtió en un correcalles que favoreció a los andaluces, que recuperaron la iniciativa (30-31).
Tras una falta antideportiva señalada a Rodions Kurucs el Unicaja abrió algo de hueco (33-37), pero los cuatro últimos puntos de la primera parte fueron del UCAM y eso propició que el tanteo estuviera igualado al descanso (37-37).
El choque se reanudó con el electrónico del Palacio de los Deportes registrando mínimas ventajas de uno y otro equipo. Con Osetkowski apareciendo en ataque -14 puntos en 17 minutos a falta del último cuarto- los malagueños seguían mandando pero por escasísimo margen.
De hecho, una falta antideportiva cometida sobre Nemanja Radovic le dio la posibilidad de voltear el resultado. El capitán anotó los dos tiros libres para el 57-56 y luego, con una bandeja, puso el 59-56 . En los diez minutos finales se entró con un 61-60 que lo dejaba todo absolutamente por decidir entre universitarios y cajistas.
El equilibrio seguiría siendo la tónica en el tramo decisivo con los visitantes ligeramente por encima (67-71 ya dentro de los cinco últimos minutos) en un encuentro en el que cada canasta había que trabajarla muchísimo. El poderío físico de los de Los Guindos, que se tradujo especialmente en el rebote (30-38) se notó y el esfuerzo realizado en la Copa Intercontinental que disputó y ganó en Singapur no les pasó factura -a ver este domingo frente al Madrid-.
78. UCAM Murcia Club Baloncesto (21+16+24+17): Caupain (4), Ennis (2), Rodions Kurucs (13), Radovic (11) y Todorovic (5) -cinco inicial-, Sant-Roos (9), Radebaugh (9), Brodziansky (4), Hakanson (14), Arturs Kurucs (-) y Birgander (7).
84. Unicaja de Málaga (20+17+23+24): Perry (17), Carter (7), Barreiro (-), Ostekowski (19) y Sima (6) -cinco inicial-, Tyson Pérez (4), Balcerowski (9), Ejim (10), Kalinoski (6), Taylor (6), Alberto Díaz (-) y Djedovic -().
Árbitros: Miguel Ángel Pérez Pérez, Emilio Pérez Pizarro e Iyán González Gálvez. Sin eliminados.
Incidencias: Segunda semifinal de la Supercopa Endesa de baloncesto que se disputó en el Palacio de los Deportes de Murcia ante 7.500 espectadores que llenaron sus gradas. Antes del partido y durante el descanso y los tiempos muertos hubo espectáculos musicales y de animación. Los jugadores del UCAM Murcia CB salieron a la pista con camisetas que llevaban impreso el mensaje 'Tomás Bellas, uno de los nuestros' después de que el ex jugador del equipo murciano anunciara que deja el baloncesto estando en el Fuenlabrada, de la Primera FEB, por un problema de salud a la edad de 37 años. Fue el último partido del árbitro Miguel Ángel Pérez Pérez, quien se retiró a los 56 años tras 25 temporadas y 806 partidos en la ACB.