Girona, 15 mar. 2008 (EFE).- Después de conseguir prácticamente la clasificación para la final a ocho de ULEB Cup con una victoria en la pista del Hemofarm serbio, el Akasvayu Girona vuelve mañana a la competición liguera con un desplazamiento a la pista del MMT Estudiantes.
El alero del Akasvayu Fernando San Emeterio destaca el buen nivel que ahora exhibe el equipo, después de los diversos cambios que ha sufrido la plantilla: "El equipo ha encontrado la estabilidad tras los últimos cambios y estamos recogiendo los frutos del trabajo realizado y esperamos poder seguir con esta racha en la Liga".
El cántabro no se fía del penúltimo puesto de su rival de turno y augura un partido duro: "será un partido complicado, todos los equipos que están abajo empiezan a ganar partidos en la segunda vuelta" ante lo cual señala cómo clave: "salir fuertes e intensos para que MMT Estudiantes vea que lo va a tener complicado para ganarnos".
A pesar de ocupar la octava plaza con relativa tranquilidad, el jugador del Akasvayu no renuncia a buscar una mejor posición en la tabla: "sería muy importante ganar pensando en la clasificación para las eliminatorias por el título y para poder escalar posiciones desde el octavo puesto".
"MMT Estudiantes es un equipo que siempre ha estado arriba, luchando por títulos pero su situación demuestra que en esta Liga empezar con mal pie te hace estar toda la temporada a remolque. Esperamos que la remontada del Estudiantes no empiece con nosotros", añadió.
Los gerundenses afrontan el partido con la baja de Román Montañez a causa de la lesión del ligamento lateral radial del quinto dedo de la mano izquierda.
El jugador se lesionó en la sesión preparatoria del jueves por la tarde y el viernes se le practicaron las oportunas pruebas médicas que han diagnosticado la lesión. Durante la próxima semana se le realizarán más pruebas para saber el alcance real de la lesión y la duración de la misma.
Por su parte, el equipo estudiantil acude al choque sin ninguna novedad en su parte médico y con la energía que les dio el triunfo in extremis en Valladolid con una canasta de Hernán Jasen sobre la bocina.