Crónica

Unicaja resiste el ímpetu murciano y vuelve a la final tras 9 años (74-79)

El Unicaja alcanzó su 3ª final de Supercopa Endesa tras eliminar al anfitrión (74-79), un UCAM Murcia que vendió cara su derrota. Ejim (18), Thomas (17) y Djedovic (16), líderes en valoración de los andaluces

  

El Unicaja cumplió el pronóstico y tiró de oficio para pasar a la final de la Supercopa Endesa aunque ganando con ciertos apuros por 74-79 al anfitrión, un UCAM Murcia que dio la talla y hasta soñó con la posibilidad de estar en la final frente al Real Madrid, aunque falló un triple en el último minuto que hubiera forzado la prórroga.

El buen nivel colectivo de los malagueños fue determinante para certificar su pase para disputar el encuentro de este domingo a las siete de la tarde en el Palacio de los Deportes con el primer título de la temporada en juego.

Un Unicaja con problemas de pívots por las lesiones que arrastran Augusto Lima, David Kravish y Yankuba Sima comenzó con dinamismo y marcando la pauta (4-9).

El equipo entrenado por Sito Alonso, arropado por su público, jugó con intensidad y cargando el juego interior lo que hizo que Dylan Otsekowski se cargara con tres faltas personales ya en el primer cuarto. De ese modo logró voltear el marcador (15-14). No aflojaron los granas, desatados con un parcial de 10-1 para llegar al 20-15.

Ibon Navarro lo paró con tiempo muerto y su equipo reaccionó para alcanzar el final del primer cuarto con el resultado de empate a 20.

Sendos triples de Thad McFadden y Ludde Hakanson pusieron al UCAM CB en ventaja (26-22), pero una buena respuesta por parte del Unicaja le permitió a los de la Costa del Sol, con una postrera canasta de Kendrick Perry, retirarse al vestuario con una renta de cuatro puntos (37-41) y con Nihad Djedovic como máximo anotador de los malagueños aunque del partido lo era Dylan Ennis, con 11.

El Unicaja subió el tono en defensa (45-52), pero los locales, a base de triples, se acercaron (54-55) con el Palacio entrando en combustión. Eso no pareció afectarle a los malagueños, que cerraron bien el tercer cuarto para seguir con el mando de la semifinal (56-60).

El cuadro murciano, con Nemanja Radovic percutiendo en ataque, mantenía todas sus opciones de victoria con diez minutos por disputar.

Ese cuarto final lo afrontó el cuadro cajista con aplomo y castigando los errores del rival. Un triple de Alberto Díaz estiró la diferencia hasta los nueve tantos con un marcador capicúa (56-65) y luego un 2+1 de Tyson Carter hizo que la renta visitante fuese de diez (58-68), aunque todavía con casi ocho minutos por jugar.

Era mucho tiempo y Moussa Diagne fue de los que mejor lo entendió. Dos canastas suyas metieron a su equipo en el partido, pero Djedovic y Carter, con un triple cada uno, disiparon dudas al colocar el 62-74.

El amor propio del cuadro universitario y su fe le hicieron soñar con lo que parecía casi imposible. A 37 segundos de la conclusión el marcador era de 74-77 y en la siguiente acción, tras un robo de balón, Dustin Sleva tuvo el empate pero falló su triple.

Alberto Díaz anotó un tiro libre para dejar a su equipo con una ventaja de cuatro tantos (74-78) y otros dos triples fallados por Howard Sant-Roos y Ennis certificaron la derrota de un combativo UCAM CB. El Unicaja buscará este domingo ante el Real Madrid su primer título de Supercopa.

74. UCAM Murcia Club Baloncesto (20+17+19+18): Caupain (3), Ennis (14), Sant-Roos (9), Sleva (3) y Diagne (13) -cinco inicial-, Kurucs (4), Radovic (13), McFadden (3), Sakho (-), Hakanson (10), Jelínek (-) y Birgander (2).

79. Unicaja de Málaga (20+21+19+19): Perry (7), Djedovic (13), Taylor (9), Thomas (8) y Osetkowski (11) -cinco inicial-, Ejim (9), Kalinoski (3), Barreiro (-), Alberto Díaz (4), Carter (12) y Diop (3).

Árbitros: Antonio Conde Ruiz, Vicente Bultó Estébanez y Alfonso Olivares Iglesias. Eliminaron por cinco faltas al local Kurucs (m.37).

Incidencias: Partido de la segunda semifinal de la Supercopa Endesa de baloncesto que se disputó en el Palacio de los Deportes de Murcia ante 7.400 espectadores. Antes del inicio del encuentro se homenajeó a al árbitro Vicente Bultó Estébanez, quien dirigió el último partido de su carrera después de 31 temporadas en la ACB.