Valencia, 12 nov. 2005 (EFE).- El Pamesa Valencia recibe mañana al Etosa Alicante en la novena edición de este duelo autonómico de la Comunidad Valenciana en la Liga ACB, en el que tratará de romper la racha de tres derrotas consecutivas que acumula.
El encuentro será un nuevo examen para el escolta estadounidense Derrick Dial, cuyo bajo rendimiento en las últimas jornadas ha hecho que el club valenciano se haya planteado la posibilidad de prescindir de él y contratar a un sustituto.
Pero no sólo Dial estará 'en observación' ya que las tres derrotas seguidas que ha sufrido el equipo de Ricard Casas han subrayado las lagunas que aún presenta el juego del conjunto valenciano.
Para salir de este bache, el técnico catalán confía en recuperar la buena defensa que el equipo practicó en los primeros encuentros, mejorarla y permitir así que el equipo tenga mayor tranquilidad en ataque, que es una de sus asignaturas pendientes.
La motivación especial que los equipos tienen en este tipo de encuentros debería ser una ayuda más para un Pamesa que por sus últimas malas temporadas está muy necesitado de tranquilidad para poder crecer.
Para este encuentro, Casas recuperará al escolta valenciano Víctor Luengo, que ha superado ya la rotura muscular que se produjo en el pie izquierdo en la pista del Barcelona y, según dijo el propio técnico, aunque no está al cien por cien, sí podrá ayudar.
Así, Ricard Casas podrá contar por primera vez esta temporada con todos sus jugadores para afrontar el choque de mañana ante el Etosa Alicante.
Una lesión en el hombro derecho en el tramo final de la pretemporada hizo que Casas no pudiera contar de manera efectiva con el alero Oscar Yebra hasta el choque del pasado sábado ante el Gran Canaria, pese a que llegó a cambiarse para el encuentro anterior frente al Barcelona.
Para ese encuentro ante el conjunto grancanario, el entrenador catalán, en cambio, no pudo contar ya con Luengo que se lesionó en la pista del Barcelona.
Fue la segunda lesión del capitán del Pamesa esta temporada ya que en el partido del debut ante el Leche Río Breogán sufrió un esguince en el tobillo izquierdo que le impidió disputar la segunda jornada en la pista del Unicaja.
Así pues, y dado que las molestias musculares de Dimos Dikoudis no le impedirán disputar el choque, Casas podrá contar por primera vez con los once jugadores que forman su plantilla tras la incorporación de Borja Larragán.
El entrenador del Pamesa Valencia destacó ayer que el Etosa Alicante, su próximo rival, "tiene una línea y un esquema bien definido y bien trabajado de juego, con aspectos básicos muy sólidos, tanto tácticos como de jugadores".
El técnico del Pamesa Valencia auguró que el partido del domingo será "muy difícil".
El entrenador dijo tener una "opinión muy buena" del conjunto de Trifón Poch, pues se trata de un equipo "que ya ha crecido y este año se ha reforzado".
Respecto a si el hecho de tratarse de un enfrentamiento entre dos conjuntos de la misma Comunidad, que además llegan al encuentro con el mismo balance de victorias y derrotas (3-3), supone una motivación añadida para sus jugadores, el entrenador afirmó que "ya sólo por el hecho de llevar tres partidos sin ganar, es importante".
"El derbi puede ser una extramotivación, pero lo que nos tiene que motivar es el tema de la recuperación del trabajo y, sobre todo, la necesidad de ganar", añadió.
Preguntado sobre las claves del choque del lado del Pamesa, Ricard Casas se refirió a la necesidad de "estar duros y regulares".
"Hay que dominar los aspectos básicos de juego, es decir, la regularidad de tiempo, el trabajo defensivo, la capacidad de mantenerlo, el rebote, etcétera", agregó.
A su juicio se trata de aspectos de juego, en los que el Pamesa ha "de seguir creciendo para, a partir de ahí, poder hablar de más cosas, pero ahora mismo no estamos en esa situación".
El entrenador del Pamesa confirmó la presencia sobre la pista valenciana del capitán del equipo, Víctor Luengo, que hasta hoy era duda por la rotura muscular que sufrió en el partido frente al Winthertur FC Barcelona.
"Luengo ha entrenado, no a un gran nivel, pero sí que ha dado muestras de poder estar para ayudar al equipo", afirmó el técnico, que, de este modo, puede afrontar el encuentro del domingo con todos sus jugadores.
Respecto al trabajo del equipo en los entrenamientos, Casas dijo que la intensidad del trabajo diario "ha de dar un resultado, pues para pasar del trabajo y la actitud que se pide en los entrenamientos al partido sólo hay un paso, y es hacerlo".
"El trabajo sigue siendo con una exigencia, que es lo que más puede garantizar que ésta sea alta el día de los partidos", aseguró el técnico, quien, no obstante, reconoció que eso "no siempre es posible, ya que hay que entender que los equipos tienen irregularidades".
Respecto a la posible salida del equipo del escolta estadounidense Derrick Dial, Casas afirmó que esta es "una situación que no es valorable, y hoy menos, porque estamos muy centrados en el partido del domingo".
Así, el entrenador se limitó a afirmar que Dial "ha hecho esta semana el trabajo y va a intentar jugar lo mejor posible".
El Etosa Alicante visita mañana al Pamesa Valencia, a partir de las 12.30 horas, para afrontar un nuevo derbi autonómico en el que espera prolongar la hegemonía que consiguiera la pasada temporada y sumar la cuarta victoria en la ACB.
Después de encadenar tres derrotas consecutivas en la liga, el triunfo en la última jornada frente al Real Madrid y el que obtuviera el pasado martes en la Copa ULEB ante el Charleroi, han permitido al conjunto lucentino ganar en confianza para afrontar uno de los partidos más atractivos para la afición alicantina.
El equipo entrenado por Trifón Poch parece haber reencontrado el camino que le llevara la pasada temporada a hacer la mejor campaña de su historia. Sin embargo, al Etosa aún le falta mucho por mejorar y, de hecho, el propio técnico lucentino considera que aún no ha encontrado la personalidad necesaria.
De hecho, Poch considera que ni Etosa ni Pamesa atraviesan su mejor momento y asegura que, entre otras cosas, el que mejor sepa equilibrar su balance de errores será el que se lleve el partido de mañana.
Alicantinos y valencianos ya se enfrentaron antes de que arrancara la temporada en la final de la Liga Valenciana. En aquel partido, el triunfo cayó del lado de los de Ricard Casas (73-78), pero fue un partido que Poch no considera como referencia, entre otras cosas porque no jugaron ni Alain Digbeu ni Iñaki de Miguel por el Etosa, ni Rubén Garcés, entre otros, por el Pamesa.
El entrenador del Etosa Alicante consideró hoy que en el derbi autonómico que enfrentará a su equipo con el Pamesa Valencia este domingo no hay un favorito pero apuntó que el conjunto valenciano "no puede permitirse otra derrota", después de haber encadenado tres tropiezos consecutivos.
"El Pamesa no puede permitirse otra derrota en casa y van a salir a muerte", por lo que avisó de que su equipo "debe estar preparado desde el primer minuto para tener buenas sensaciones".
El preparador lucentino comentó que, en su opinión, los enfrentamientos entre lucentinos y valencianos son "cada vez más derbi" y explicó: "a poco que mantengamos un buen nivel competitivo y se gane en tradición, irán adquiriendo más categoría de derbi".
En este sentido, resaltó que la "incertidumbre" en el resultado que se ha dado en los últimos enfrentamientos añaden "un punto de interés más" a un partido que para ambas aficiones son importantes.
Poch considera que para el partido del domingo no se puede hablar de favorito y, de hecho, recuerda que ambos equipos han ganado tres partidos y perdido otros tantos en la ACB.
"Es un juego muy divertido eso de decidir la importancia de quién es el favorito. Ambos equipos estamos en una situación similar, aunque nuestra última victoria ante el Real Madrid nos ayuda a tener algo más de confianza", argumentó.
Poch destacó que, el domingo, el que sepa "equilibrar mejor sus errores" tendrá mucho adelantado para lograr la victoria ya que: "los dos equipos buscamos todavía nuestra personalidad para ser más consistentes".